Quantcast
Channel: SuperSonicGirl
Viewing all 380 articles
Browse latest View live

Ciclos

$
0
0
Digamos que hice bien, pero que lo que tomé tampoco está en mi mente que sea algo muy duradero.

Ni mucho menos definitivo.

Paso por otra de mis épocas de... "¿soy yo o todos los demás avanzan mientras yo estoy aquí viendo al vida pasar?". Y también de... "¡dioxxxxxxx dame la paciennnnnncia que mis padres no me transmitieron genéticamente!".

No soporto despertar todas las mañanas así:






Más tarde...





Cuando en realidad...




Yo soy Joan Holloway, obviamente


Y tengo que permanecer muy low key cuando en realidad...






Y hasta aquí puedo leer.

Eso es lo que pasa.

The Hole 2

$
0
0
El año pasado intenté ir a The Hole cuando estuvieron en Palma. Pero curiosamente a quienes les mencioné si les apetecía venir conmigo:
  • Unos ya habían ido. Bueno, vale.
  • Alguno me respondió con que le parecía que tenía algo de cutre y no les apetecía. Vale, vale.
  • Otros, simplemente ni me respondieron y luego vi con mis ojitos las fotos que publicaron. Olé.
Este año, me armé de valor y le pregunté a alguien que también podría haberme dicho que no. Pero no lo hizo. Así que sí, ya puedo decir que he ido a The Hole.

Vale, a The Hole 2.

Pero he ido.

Y me ha encantado.

¿Cómo explicar lo que es The Hole 2?

Mariquitismo fino, con muy mala leche y muchísimo mejor humor, risas, erotismo y lujuria. Maromazos y pibones. Domingas y pirindolos. Plumas, maquillaje, lentejuelas y exageraciones a tutiplén. Sorpresas, talento, artisteo, fuerza y flexibilidad. Gatitos y ratas. ¿He dicho humor? ¿Y risas? Por si acaso, porque de verdad que sales de allí con un buen subidón positivo.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


El año pasado debería haber reunido valor e ir aunque fuera sola. Porque, al menos a mí, me vale la pena ver un espectáculo así. Estas cosas me dan la vida, nenis. 

Si yo hubiera nacido con un mínimo de talento aceptable, hubiera sido artista del musical o del cabaret, o de las dos cosas, y no una diseñadorzucha gráfica que cada vez se convence más de que, aunque le gusta su trabajo, nadie lo valora. 

Artista. 

¡Qué palabra tan bonita!

Me tocó de MC Javi Enguix. No decepciona, fue divertidísimo y picaruelo. Muy fan. 


Javier... call me!

Sergio Blanco puso a todo el mundo firme y en su sitio...



Y, aunque me encanta el rollo de Vinila von Bismark, tengo que deciros que me rechifló Graciela Monterde. Sólo os diré, que hay pocas personas a las que yo imagine oficiando una boda ;)



En fin, que los lunes son muy duros, y últimamente más. Al menos para mí. Pero al menos estoy súper contenta de haber pasado una de las mejores tardes de domingo en mucho tiempo.

¡Qué viva el cabaret! ¡Que viva el teatro! ¡Qué viva la revista y el musical!


Pd: y que además, el twitter oficial (@TheHoleShow) y algunos de sus artistas me retuiteen, den likes a mis tontás y me respondan algunos comentarios... mola miles.

Cada lunes...

$
0
0
... empieza la cuenta atrás para el fin de semana, que empieza en cuanto salgo del trabajo.

No sé qué pasa pero este año se me está haciendo especialmente duro. Mucho.

Ya casi los domingos por la noche (teniendo en cuenta que anochece más tarde en verano, menos mal), empiezo a pensar: "Pfffffffff..."

No quiero ni pensar lo que sería si fuera invierno.

Los miércoles, a mitad de día, ya la cosa como que va yendo mejor. Lunes y martes son como una especie de tortura semanal.

Paso una media de 9 horas, casi seguidas, sentada. 

No lo ssssssoporrrrrrrto. 

Y ya no digo más sobre esto, que no es el momento.

Cada vierenes por la mañana es un "Pfffff", porque igualmente no soy de buen despertar.



 Y luego me acuerdo de que es viernes y es como....



Pero que aún así tengo que levantarme y seguir con el protocolo de alguien que no es millonario y necesita pagar sus facturas.


Y luego otra vez...


Todo muy loco, pero seguro que no os sorprende, porque como soy géminis os tiene que parecer súper normal.

Entonces pienso: "Fin de semana, por ffffffffin joderrrrrrrrr". Y entonces quiero montármelo guay, haciendo cosas, pero sin estreses, que por desgracia sólo son 48 horas y tampoco quiero llegar al domingo por la noche arrastrándome. Así que toca hacerse un firme propósito.



No os voy a engañar. Hay fines de semana que me lo paso genial, en los que acabo hecha un trapo y otros en los que consigo un equilibrio muy majo de chachismo y perrismo. Y luego hay otros en los que me da igual el equilibrio y recorro mi triángulo de las Bermudas personal: cama, sofá y cocina. Con pequeñas escalas al cuarto de baño entre y entre.

Pero lo más importante, LO MÁS IMPORTANTE, es que el viernes, la última hora, media hora, cuarto de hora o 10 minutos antes de salir, ningún iluminado me venga con "urgencias". Porque si tan urgente es, has tenido todo el puto día para pedirlo. Así que no me jodas, porque lo único que vas a obtener de mí es un:




Por si no os lo había comentdo antes. ¿Os acordáis de este pequeño?





Pues vuelve a estar activo.

¡QUE COMIENCEN VUESTROS DEDITOS A CRUZARSE!


pd: Últimamente no puedo con la vida de algunos seres humanos.

Previously...

$
0
0
... en este blog, os comentaba lo mucho que me estaba costando cierta situación con la que no me sentía cómoda. Nada cómoda.

Evidentemente se trataba de mi situación laboral.

Me fui de un sitio donde había alcanzado cierto nivel después de habérmelo currado mucho, pero que veía que se estaba desmoronando. Y no por culpa de los empleados, porque lo que más rabia da es que muchos de mis compañeros eran la razón por la que me gustaba estar allí. No la empresa, sino la gente. Porque al final, no me cansaré de repetirlo, lo que importa es la gente.

Total, que me fui y estaba muy ilusionada. ¿Quién no lo estaría? Un luegar nuevo, un proyecto nuevo, un tema nuevo... Pero al poco de estar allí, notaba cosas. Cosas que no tendría que estar notando tan pronto. Pero decidí que es que estaba tan quemada del otro lugar que me había vuelto demasiado susceptible. Ya sabéis, yo y esa manía que tengo de no fiarme de un radar que pensaba que no tenía.

Pues bueno, queda anunciado oficialmente que no he superado el periodo de prueba y que, por fin, voy a poderme desconectar más de cuatro días seguidos.

Sí, nenis, este año sólo había tenido tres días de vacaciones y luego, en lo que ya es mi extrabajo, una semana en la que no conseguí quitarme del cuerpo la sensación de que no estaba consiguiendo encajar. Ni del cuerpo, ni de la cabeza. Porque yo tendré mis defectos y saldría bastante escamada del otro sitio, pero si algo aprendí allí es a identificar gente cabrona, prepotente, egoísta, con un déficit de atención que se sale de las escalas máximas. y bipolar.



Que casi cada día seas testiga de alguna movida, de gritos, de malas palabras, encima a personas que se dejan la piel y que se las menosprecie de esa manera y, a algunas, se les haga mobbing... Que reinonas y energúmeros con un poco de poder se crean con derecho a hablar de cierta manera a empleados que regalan su tiempo y conocimientos. Llamadme loca, pero muchas ganas de estar allí no me daban.



Y se me notaba. Bastante. Mucho.

No había mucho margen de "creatividad" porque todo se tenía que cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar. Y cambiar...


"And then..."

"And after that..."

"And I can't arrive home everyday and get drunk, Nene. Uh, uh, no. I can't. Bye, girl".


No, no eran los típicos cambios de así o asá o simplemente empezar de nuevo porque se prefería otra cosa. No. Eran los cambios que pide una persona con déficit de atención y que, sabrá de lo suyo, pero también cree saber de lo de los demás, que sólo pide cambios sin sentido y, para más inri, sin dar ni un mínimo margen a delegar. Alguien, que se cree tan por encima de los demás, que da igual que haga viajes espirituales a donde le dé la gana: no sabe ser líder, no sabe tratar a las personas que tiene trabajando en su empresa, excepto a las que le lamen las posaderas.

Espero que algún día se entere de que más de una vez en el mismo día alguien ha dicho: "esta persona no tiene ni puta idea, está completamente loca". 

Y que muchas veces fue dicho por alguno de sus acólitos.

Me llevo el haber conocido a gente muy maja y muy trabajadora, súper preparada y que no puedo creer que no les salgan otras oportunidades donde estoy segura que se pelearían por tener a esas personas. Segura no, segurísima.

Me llevo la satisfacción de saber que no he estado inventándome las cosas, que tengo que hacerme un poco más de caso.

Que me han hecho un maldito favor, joder. La tensión acumulada del último ha año me ha pasado factura en mi salud y doy gracias por no tener otras cargas para poder centrarme en mí misma. Y creo que esta es la manera que tiene el universo de decirme: "para de una puñetera vez para poder seguir adelante, carajo".



Pero también me llevo el mal sabor de boca de saber que una buena amistad me ha notado que no estaba agusto, que no sentía que encajaba en ese lugar y que, por lo que sea, se necesitará tiempo para que volvamos a retomarnos como hasta hace nada. Porque realmente eso es lo que más me preocupaba de todo esto, que se decepcionara.

Ella sabe de lo que soy capaz con mis habilidades y más de una vez ha afirmado que si se hubiera delegado un poco más en nuestro equipo, todo habría sido más fluido. Pero es que no ha sido así y me siento fatal por no haber sabido adaptarme a algo que era tan sencillo como pasar unos esbozos/esquemas gráficamente clarísimos a photoshop, repetirlos las veces que se pidieran y callarme. Porque en realidad yo no tenía ni voz ni voto. Y si he podido decir cuál era mi recomendación o predilección, parecía que era motivo suficiente para que cierta persona lo echara por tierra y... sí... pidiera más cambios... más versiones...

Más de 50 versiones de un sólo cartel... ¿cómo lo veis?

"But shitty-believable, Gordon"

Sé perfectamente que el trabajo del diseñador gráfico está muy, MUY infravalorado, pero después de esta experiencia me ha quedado, no claro: cristalino.

Y perdóname si me voy a mi hora, pero seguro que no has contado las veces que he comido delante del ordenador mientras curraba. Eso no, ¿verdad?. Pero eso no sólo yo, un montón de gente. ¿Que los demás se quieren quedar? Perfecto, pero yo también tengo un pasado laboral en el que no me da la gana regalar más mi tiempo. Repito que he regalado muchas veces mi hora de la comida y otras veces que me quedé después. No querida, no. Como decía una compañera que tuve en otro trabajo: I have a live.



No soy sólo alguien que trabaja con un ordenador muy caro y muy bonito. Intento interpretar tus ideas para crear un concepto, una continuidad, una consistencia... pero cuando llegas al punto de si lo quieres morado, será morado y si en cinco minutos lo quieres rojo con topitos naranjas, así será... Tú no necesitas un diseñador, lo que tú necesitas es alguien que siga tus instrucciones dócilmente, le dé igual que te pases por el forro su opinión y haga enésimas versiones de culquier cosa y luego la califiques como tacky y a esa persona de incompetente y que no sabe nada.



Y vuelvo a repetir que sé muy bien que no soy perfecta. Si algo no me gusta, se me nota. Y esta vez no me ha gustado. ¡Y vaya si se me ha notado!

Así que gracias por la experiencia pero por encima de todo valoro más una amistad, que espero que no se haya afectado para siempre, que la bipolaridad y egocentrismo de personas a las que no les importo ni ellas me importan a mí.


"Same face, less bottox"



Por cierto, estoy bastante tranquila. Estoy extrañada de mí misma. No sé, a lo mejor es cierto que necesitaba parar y no me había dado cuenta.


Y ya está.


Si hay alguna novedad, lo sabréis en cuanto veáis a King Bob. De momento...







Sin noverdad

$
0
0
Y me refiero a mi estado anímico.

Todo bien por el momento.

Sorprendentemente bien.

Me resulta tan raro tener todo este tiempo libre... Sin tener que contar los días, las horas, cuadrar cosas con el tiempo de los demás y que me quede tiempo para mí y petardear...

Y lo más cachondo es que todo el mundo me dice que muy bien, que descanse, que si quiero dormir, que duerma, que quiero dibujar, que dibuje, que si tal, pues tal.

Nenis, si yo tuviera un futuro económico asegurado, le iban a dar mucho por saco al trabajo. Me pasaría las horas en mi estudio, viajando, en la playa, cocinando, leyendo y coleccionando zapatos.

#esasí

Para cuando leáis esto hará una semana que disfruto de estas inesperadas vacaciones. Es bien. Es muy bien.



Me han preguntado en los comentarios, que si ahora que tengo más tiempo libre voy a retomar más lo de escribir en el blog.

Pues puede que sí. Puede que no. Ni puta idea, porque tampoco sé si voy a tener mucho que contaros. Soy una señora de gustos sencillos, que lo mismo encuentra frases que me leen el pensamiento...

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


... que me doy al Martini Rosso en una piscina (esto se está convirtiendo en mi especialidad)...


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


... que le gasto bromas a la mamma diciéndole que me he vuelto loca y me he hecho otro tatuaje*...



Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


... o Frida viene a despertarme saltando encima de mí para enseñarme la enésima piedra que se ha encontrado....


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


... también puedo espachurrar cachorretes barrigones adorables y de los cuales no me quiero desprender...

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


... y luego acabo del día viendo una puesta de sol aluncinante con una pedazo de clara a un lado y mejor compañía al otro.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el



He tenido unos microscópicos atisbos de "pffff como me dé el bajón verás la que voy a liar", no lo voy a negar. Pero así, en general, bien.

No. De momento mal no se me está dando esto de descansar.

Os mantendré informados.




Esta es una de esas ocasiones en las que el refrán ese es muy cierto, no hay mal que por bien no venga, y las palabras de Steve Jobs, "Stay hungry, stay foolish".




* lo que no sabe es que hace ya rato que me ronda la idea de hacerme otro tatuaje, pero de verdad, y la idea ya está tomando una forma bastante definida. Veremosssssss.

Seeeeeeeh, ya son 12

$
0
0
Hoy es el día y no me va a pasar como el año anterior, que por movidas varias, no pude celebrar el aniversario de este blog con su tradicional lavado de imagen.

Lo siento Moira querida, pero tu tiempo acabó. Como reina de este blog, claro. Esto va como lo de las misses: tu reinado dura un año y luego dejas a otra que se ponga la corona. Gracias por tu presencia, ha sido espectacular.

Este año, me ha dao por el rollo africano. No os penséis que lo tenía yo muy pensado, porque la cabra tira al monte y yo me iba derechita al playerío, tropicalismo y esas cosas que me gustan tanto y que son muy mías. Pero aaaaaay... Me encontré con esta pedazo de tía... y me he rendido.

Os presento Wanda Dayo*, la dominatrix salvaje. Ella originalmente, tal y como la pintó el maravilloso Alberto Vargas, era así:


Era una de las pin-ups que creó para Playboy en 1973. Tremenda. Mirad que a mí me gustan los tíos, pero con ese pedazo de cuerrrrrpo que me gasta la señora, por unos segundos he dudado de mí misma.

Por desgracia, no hay duda, me siguen gustando los tíos. Sólo los tíos. Jopetas.

Total, que una vez ha aceptado el supersonictratamiento de belleza, aquí la tenéis:



Me ha gustado mucho el resultado, la verdad. No ha hecho mucha falta adornarla con nada. De hecho, la he tenido que "vestir" jajaja.

Vale, no mucho, pero al menos no me censurarán la fotos porque se vean pezones. ¡Qué ganas tenía de poner unas pezoneras a una de mis pin-ups!

Abro inciso para comentar un pensamiento: si yo fuera tío, os aseguro que no podría decidirme entre tetas o culo. Cierro inciso.

Y los tatuajes, ¿eh?. Que no me falten. No muchos que no le hacían demasiada falta, pero ahí están.

Así que nada, pielerío, joyerío y poderío.

Por supuesto, las cabeceras de mi Facebook y Twitter están cambiadas.





Tengo una foto de perfil la mar de sexy...



Y en Metro&medio también he hecho lo propio:






Y  bueno, si ya os queréis dar un paseíto por mis rincones de RedBubble y Society6, pues estaría estupendo también. Porque me han quedado unas cosas monísimas con Wanda.

Ya son 12 años de blog.

DOCE.

Son unos cuantos. 

Me parece alucinante que haya durado tanto y que todavía haya gente que se pase por aquí. Sé que cada año digo lo mismo, pero es que verdad. ¡Si yo soy una mindundi! No sé, será la mala leche revenía que tengo que os hace gracia o algo ;)

Por el momento, os puedo decir que aunque más tranquila a la hora de actualizar, no pienso abandonar. Aunque no venga mucho por aquí, esto sigue siendo una de mis vías de escape y mientras me siga gustando, la seguiré usando.

Una vez dicho esto... como muchos de vosotros estáis con vuestro trabajo y rutinas  habituales... no es por nada, pero ya que momentáneamente tengo estas "vacaciones"... y sin ánimo de restregaros nada por la cara... me voy a celebrar mi hazaña bloguera con un poquito de yoga y luego un chapuzón en la playa.

Y ya está, ni tartas, ni nada de nada. Que gracias a mi querida tiroides, tengo que ponerme en forma y no me da la gana pasarlo malamente por no poder ser de esas que comen y no engordan.

Bueno... a lo mejor un gintonic a VUESTRA SALUD sí que me tomo.

Me lo merezco.

Un poco sí.

Son 12 malditos años de escribir chorradas.



¡Chinchín!






* Dayo, en africano, por lo visto significa pleasure is coming. No os digo nah mah.

Mi vecindario

$
0
0
Hace más de 1 año que no os cuento de mis vecinitos. ¡Esto no puede seguir así!



PT: ¡Hoooolaquétal!

MJ: ¿Quién eeeeeees?

PT: Pita Taukatofua

MJ: ¿Quién?

PT: Pita Taukatofua

MJ: Te lo estás inventando, lárgate, no soy creyente y...

PT: ¡Que soy el abanderado de Tonga y...!

MJ: Bueno, bueno, buenooooo... pero haberlo dicho antes muñecooooo.

PT: Es que pensaba que te sabías mi nombre y....

MJ: ¿Para qué?... digooo clarooo, es que no tenía claro el acento... No voy mucho por Tonga, ¿sabes?.

PT: Ya... comprensible. Verás, que me acabo de mudar al vecindario y quería saber qué tal el ambiente y eso.

MJ: ¡Estupendamente! Esto es como muy ideal, muy Melrose Place pero sin malos rollos y esas cosas. Todos estamos buenorros hasta decir basta, somos majisísisimos... brillas como mucho, ¿no?.

PT: Ay chica, es que aún no he conseguido deshacer de los litros de aceite de coco que me pusieron para la ceremonia de apertura.

MJ: Ahá...

PT: Yo creo que parecía un poco reinona, pero te juro que nuestro traje regional es así.

MJ: Ahá... Ahá...

PT: No veas el cachondeíto en Twitter por culpa del crío avergonzao que iba a mi lado...

MJ: Ahá...

PT: A ver, que lo que la gente no sabe es que el chaval iba cegado por el fulgor de mis músculos...

MJ: Yatedigo... digo ahá... Ahá...

PT: ¿Y hay alguna costumbre por esta, ahora también mi comunidad? No quiero caer mal a nadie, como soy el nuevo y eso.

MJ: Pues sí, hay una especie de rito de iniciación.

PT: ¿Ah sí? ¿Cuál, cuál?

MJ: Pasa, pasa, que te lo cuento mientras le echas un vistazo a mi colección de batamantas y veo si te puedo ayudar con eso del aceite de coco... y ya tal.

PD: Pita Tauka... loquesea... Call me!




******************************


En el Hoooolaquétal anterior: Calvin Harris
  
******************************

Slow down and fix your shit

$
0
0
No sé si al resto de los seres humanos les pasa, pero si tuviera que pertenecer a una raza de alienígenas creo que sería la de los fluctuantes o algo así.

No me malinterprtéis, estoy bien y todo eso. Pero es cierto que no me termino de acostumbrar a mi nuevo estatus. Me resulta muy, muy raro después de haber pasado una temporada muy a full y estresada. De repente, disponer de tanto tiempo, hasta me hace sentir un poco culpable. 

Cuando todo el mundo parece disponer de tiempo, yo no lo tengo. Y cuando yo lo tengo, los demás no. Ese maldito Murphy dando por saco, as usual.

Pero en mi caso me preocupa, porque no es lo mismo tener la necesidad de estar sola, que sentirme sola.

Lo del sentimiento de soledad lo he tenido siempre bastante presente y arraigado en mí.

Y hay veces que lo combato. Y me sale bien. Hago un montón de cosas, me mantengo ocupada, nada de manos ni mente ociosa.

Pero hay otras veces en las que no me concentro, no puedo combatir. Empiezan a darme vueltas las cosas en la cabeza. Algunos pensamientos me rondan y los racionalizo como puedo. Porque si los dejara campar a sus anchas estaría de atar.

Últimamente me está pasando un poco esto que os cuento. Que me siento sola. 

Con lo del 25º aniversario del Nevermind de Nirvana, he usado la app de la calculadora del teléfono (los números me bloquean) y me puse a pensar qué hacía yo hace un cuarto de siglo.



Osssea: un puto CUARTO DE SIGLO.

Yo, que usaba una calculadora normalera para saber cuántos años tendría en el 2.000, no me puedo creer que ya tenga más de un puto CUARTO DE SIGLO.

Y que esté ya más cerca de tener dos. 

En fin, ese no es el tema que nos ocupa en estos momentos.

Por alguna razón, la mayoría de las veces, cuando he necesitado a alguien, un apoyo, no ha existido. Incluso con las personas que yo he considerado muy cercanas y en las que me he atrevido a confiar, siempre he pensado que en realidad, no les importo.

Hoy en día, eso me sigue pasando.



Cuando salió el Nervemind, yo era una adolescente que no tenía ni puta idea de las cosas. Sólo me interesaba la música, leer y dibujar. Quería ser diseñadora y ya me iban diciendo por casa que con eso no iba a llegar a ninguna parte.

Siempre iba con vaqueros, calzado cómodo y camisetas súper anchas. Todo muy grande para que no se notara nada de mi cuerpo. Es que a esas edad yo ya estaba más que desarrollada y me moría de vergüenza. Llevaba siempre el pelo largo recogido en una coleta, me empezaba a quitar las gafas si no tenía que estudiar. Vamos, en un mundo paralelo, los mozos se pirraban por mis huesitos ¬¬

Mis notas no eran malas (excepto en mates, siempre las he arrastrado), me dejaba llevar un poco por la corriente... Creo que pasé un poco sin pena ni gloria. Nunca he sido una persona llamativa y tampoco he tenido la sensación de que encajara en ningún lado.

Sé perfectamente que las amistades vienen y van. Que son pocas las personas que permanecen en nuestras vidas para siempre. Que con unas te sientes más afín durante una temporada y con el tiempo, los caminos se separan mientras se van juntando otros. Con suerte, esas relaciones son tan fuertes, que se vuelven a encontrar.

Pero es así, no solamente tengo muy presente esa sensación de soledad, sino también la de no encajar. 




Lo pero era cuando yo intentaba encajar en tal o cual grupo, cosa, persona o situación, pero sin conseguirlo. Me frustraba mucho. Aunque supongo que con el tiempo y la edad, algo hace clic y te das cuenta de que si te estás esforzando tanto, pero lo que tanto quieres no sucede, es porque no tiene que ser. Eso ayuda bastante a relajarse. Y también a comprender que no todas las personas que quieres que se queden en tu vida, tienen necesariamente que quedarse. Porque tú también te vas de la vida de otras personas, pero sólo te dabas cuenta del vacío que te dejaban a ti y no al revés.

Pero ahí está otra cosa más: estoy prácticamente segura de que yo no he dejado ningún vacío ni nada de eso porque yo no creo que haya sido relevante en la vida de nadie.

Es que llevo muy mal lo de los alejamientos y pérdidas, ¿sabéis?. Al menos hasta que ese clic, que he mencionado antes, sucede.

Me está quedan un post muy lacrimógeno.



Y yo sigo muy fielmente las palabras de Kim K.

Preach KiKi!

Total, que supongo que tener todo este tiempo libre es una manera que tiene la galaxia de decirme el título de este post: slow down and fix your shit.

Puede que no me pueda quitar nunca este sentimiento interior de soledad. Puede que siga sientiendo mucho que los caminos se separen. Puede que siga creyendo que no termino de encajar en ningún lado. Pero quién sabe si en algún momento todo esto cambie y ocurra EL CLIC y encuentre un sitio donde sí sienta que encaje, donde sentirse sola no ocupe un gran espacio.

Lo único que sé es que, aunque tenga momentos de ermitaña huraña, necesito el contacto de la gente, aunque crea que yo no les importe. La compañía es importante y esto, hace unos años jamás lo hubiera admitido. Porque estoy muy habituada a estar sola, ya no sólo a sentirme sola.

Obviamente, tener buena compañía es fundamental. 

A veces no tiene que ser de gente que conozcas.

Otras veces sí. Pero a mí esto me cuesta. La mayoría de mis amistades no forman parte de un mismo grupo y me cuesta la vida reunir a más de dos personas. Tanto, que hace tiempo que dejé de intentarlo.

De un tiempo para esta parte, me repito bastante amenudo eso de "sólo disfruta del momento". Pero soy géminis, mi lado racional tiene que salir al quite con un "vale, pero tampoco te pases".

Y ahí me encuentro, que a veces quisiera hablar de estas cosas con alguien, pero o no me atrevo, o no sé cómo sacar el tema porque me da miedo aburrir...

Pero luego recuerdo que tengo un blog y echo aquí toda mi mierda y eso.









Si todo va bien...

$
0
0
... mañana voy a estar dándolo todo... ¡en el concierto de los Red Hot Chili Peppers!

Aaaaay, que será la tercera vez que les vea en directo y estoy de un emocionao que no me soporto.





Me da lo mismo lo que me digáis, pero no importa los años que tenga Anthony Kiedis: Call me Anthoy, c-c-c-call me!

Volveré a fliparlo mucho con el subidón que lleve Flea, el aporreamiento de tambores de Chad Smith y a ver cómo se lo monta Josh Klinghoffer con la guitarra en directo. Me suelo referir a él como "el otro", porque han cambiado tantas veces de guitarrista que ya me cuesta memorizar quién es el de turno. A día de hoy, no tengo muy claro si me quedaría con Dave Navarro o John Frusciante.

Tengo muchísimas ganas de escuchar el nuevo disco, The Getaway, en directo. ¡Nerviosssss!

En fin, tengo una relación musical (pero repito, si Anthony quiere, podría ser algo más y ahí lo dejo) especial (Anthony, podría ser mmmmuy especial). A todo el mundo le gusta el Under the bridge y el Give it away, pero este grupo es mucho más.

Empezaron con el funk que luego mezclaron con el rock. Luego se ha tirado más por el rock (oullea) con algún que otro retazo funkero. ¿Qué queréis que os diga? A mí, que me pirra el rock, el clasicazo de toda vida, el garage, el grunge, alguna cosa de nu metal... que vengan estos tipos y le metan un poco de funk... Podría haber sido un desastre, pero no. ¿Por qué? Porque esta gente ha mamado funk y rock. Tienen un puto bagaje musical estupendo y supieron cómo poner de aquí y de allá para que saliera algo increíble-ble que pocos, o prácticamente nadie, ha sabido igualar.

Y esto es así.

Así que, lo dicho: la noche del sábado al domingo me lo voy a pasar genial disfrutando de un conciertazo y, después, rememorándolo.

Pocas cosas hay que me encaaaaaaaanten tanto como ir al concierto de un artista/grupo que me guste de verdad. Habrá gente que pensará que esto es tirar el dinero, pero para los que adoramos la música, os aseguro que tener la oportunidad de disfrutar algo así es algo muy grande. Es algo que tienes dentro, que cuando estás en el concierto, la música te envuelve y se te mete dentro y es imposssssible que no VIVAS ese momento.

Porque no estás allí como quien se sienta a esperar el bus, lo VIVES. La música se convierte en parte de tu sangre, y aunque sólo cantes en la ducha o seas un experto en air guitar, si te gusta la música, no sabrías vivir sin ella.


Y hasta aquí mi exposición sobre lo que haré este fin de semana y una de las cosas que me dan la vida.





RHCP o lo estupendo que fue el concierto de ayer

$
0
0
Así es, los Red Hot Chili Peppers no decepcionaron anoche en su primer concierto de Barcelona con su The Getaway Tour.

Muy fan, nenis, muy fan.

Lo de los teloneros, Badbadnotgood, fue un poco de traca. El nombre ya da pistillas de lo que pienso de ellos. No pegaban ni con cola. Dos cositas:
  • Mientras llegábamos a nuestos sitios, pensábamos que habían puesto a Kenny G y empezamos a mirarnos con unas caras de fliparlo mucho.
  • El mejor tema fue el último. Nos tragamos unos 30-40 minutos de actuación, donde lo mejor estaba al final, que era lo que realmente nos gustó. Así no váis a llegar muy lejos muchachos. Aún sois jóvenes, hacedme caso con esto.

En un principio, se supone que iban a ser La Femme. Bien, pues buscando info de esta gente, probablemente me hubieran gustado más que los arriba mencionados. Porque resultaron ser un batiburrillo de sonidos caótico, con un saxofonista que parecía cansado, un bajo/guitarra (no lo recuerdo) a la moda pre-Justin Bieber y que parecía que tenía 14 años... un teclado que parecía Carlitos con su piano de juguete... El único que valía la pena era el batería. Pero a lo mejor tampoco soy muy objetiva, porque tengo una frustración muy grande por no haber podido aprender a tocar la batería y siempre acabo alucinando con la percusión. Tendría que haber sido más pesada para conseguir que mis opás se dieran por vencidos y me dejaran hacer "ruido"  ¬¬

Vale, puede que también les echo el ojo a los baterías. Que no sólo los frontman son objeto de mi deseo, ¿sabéis?. Que soy una chica gustos muy variados ;)

En resumen: que no.

Con unos 30 minutos de retraso, ya nos estábamos poniéndonos todos de los nervios y quedándonos sordos con los silbidos y gritos de la gente. A mí a punto de darme una lipotimia del calor que hacía y la puñetera ansiedad que me anticipaba lo que, efectivamente, fue un tremendo concierto.

Se apagan las luces.

Se oye una trompeta.


 Empiezan a salir Chad Smith, Flea y Josh Klinghoffer a liarla muy parda con una de las mini jam sessions que nos regalaron. A mí me empieza a dar de todo, que venía yo un poco marchita y fue como quien riega una margarita tristona.

Un foco apunta a Anthony Kiedis.

A la mierda, empecé a chillar cual adolescente desbocada.

No lo puedo evitar, tengo debilidad por los señores. Señores rockeros. Señores rockeros tatuados.

Anthony, Flea y Chad pasan de los 50. Pues les dan mil vueltas a muchos jovenzuelos que andan por ahí. Bestial. Incluído el joven Josh, que está a mediados de la treintena. Y se nota.

Empezaron con Can't stop y se nos metieron en el bolsillo con la misma facilidad que le quitas un caramelo a un niño. Tal cual.

Con sus subidones y sus momentos tranquilos, fue espectacular. Y no necesitaron una gran maquinaria escenográfica para que les quedara un ambiente fabuloso. Cientos de lámparas flotante y en constante movimiento, formaban mosaicos con diferentes colores, alturas y formas. Combinado con unos gráficos entrelazados con imágenes en una gran pantalla de fondo... #FAN

Siempre termino diciendo lo mismo, pero adoro escudriñar el montaje de escenarios y toda la parafernalia que les rodea. Me encantó ver dónde estaban los bajos de Flea y las guitarras de Josh. Yo, que no tengo ni zorra, de repente pensé que quien se encarga del cuidado y las pruebas de esos instrumentos, me pareció que era el mejor trabajo del mundo.

Vale, el segundo mejor trabajo del mundo.

El primero tiene que ser el que se ocupa de la batería de Chad.

Mención especial para Chad Smith, por favor. Porque no sólo me flipa la batería, me flipa él, su técnica, lo cojonudo que es todo lo que hace. Es puto animal armado con baquetas que, de vez en cuando, lanza al público. Maldita sea, no tiró ninguna hacia mi sector. Hubiera mordido muy fuerte para conseguir hacerme con una.

Chad estuvo increíble, potente, rotundo, preciso. A tus pies Chad, a tus pies.





Y bueno, bueno, bueno... llega el momento en que Anthony se quita la camiseta y el Palau Sant Jordi no se cae del griterío de puritito milagro. Los años no pasan en balde, ¡pero cómo está!

Pero eso sí, por favorcito Anthony, no más bigote y sí más pelo largo. Por todos los dioses, aunque sea hasta los hombros.

No paró con su particular baile, que en un momento dado pensábamos que se iba a arrancar por jotas. No os digo más. Pero ahí estuvo, dándolo todo, saltando, bailando, cantando, manejando ese micro con cable de toda la vida. Esa voz, esa vooooooooz. Anthony, por tercera vez no has reparado en mí, pero te aseguro que seguiré insistiendo.

¿Momento Flea? ¡Todo el tiempo! Es el auténtico MC de todo el invento. No para, no estuvo más de 10 segundos quieto en el mismo sitio. Y cómo se conserva también el tío.

No me voy a extender mucho en sus habilidades con el bajo porque probablemente Flea sea uno de los mejores bajistas de nuestra época. De hecho, RHCP no serían ellos mismos sin ese bajo tan caracterísitico. B-R-U-T-A-L. Y es que hace auténticas locuras al mismo tiempo que toca.

La complicidad que hay entre Anthony y Flea es increíble, por cierto. Su relación se nota que es totalmente diferente y especial con respecto al resto de la banda.

Los duelos de cuerdas (mi compi N y yo nos estuvimos partiendo de risa diciendo, venga, otro duelo de mástiles, somos así de atontaos) con Josh eran una pasada. Era ver a dos personas entrar en trance con sus respectivos instrumentos en perfecta sintonía. Luego se unía Chad con la batería y eso era magia.

Recorrieron varios temas clásico, por supuesto, y los de su nuevo disco, The Getaway. De éste, yo tengo mi canción más prefe y no llegaba.

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el

De repente se retiran del escenario y cunde un poco el pánico.

Las luces continuaban apagadas, así que aquello aún no se había acabado.

Cuando, de repente vuelven, ¿y con qué canción comienzan la 2ª parte?



Goodbye Angels. El séptimo tema del actual álbum, The Getaway y desde el primer momento que la escuché supe que iba a ser mi canción favorita de todo el disco.

AMOOOOOOOOOR.

Y mientras tanto, las luces y la pantalla en perfecta sintonía acompañando toda la locura. Empieza el Give it away y todas las manos arriba al mismo ritmo. Anthony volviéndose muy loco, Flea sin perder el resuello, Chad en plan monstruo de la batería y disparando baquetas a diestro y siniestro... Esto es lo que yo llamo PARAÍSO.

Peroooooo... Josh, tenemos que hablar, querido. Desde el cariño.

Puede que yo no sepa tocar la guitarra y tú lo haces genial. Y aquí es donde pongo el pero: passssa de la pose, macho. Que en algunos momentos pasamos pena por tus articulaciones. Todas ellas. Dedícate a tocar la guitarra. Tú aprendiste del inigualable John Frusciante. ¿Por qué no aprendiste de su presencia? Él no necesiaba tanta locura corporal, porque John es un puto amo de la guitarra y sus notas son limpias, cristalinas, corrosivas, y celestiales al mismo tiempo. Puede que tu estilo sea un poco más sucio (respect), pero tienes que respetar a tus antecesores y, aunque tengas, perdón, debas poner de tu cosecha, el Scar Tissue y Californication se respetan.

Estos tipos te llevan unas dos décadas de ventaja y corres el peligro de que a los fans no nos llegues demasiado al corazón. Y no es por la diferencia generacional, ni porque te falte talento, es porque antes que tú estuvieron algunos de los guitarristas más míticos de la banda. Por orden de preferencia:
  • Hillel Slovak, que si no hubiera sido por esa adicción que acabó con su vida, ahora mismo sería uno de los guitarristas más respetados de la actualidad. Puro sonido Peppers. Él sentó las bases de las que bebió John Frusciante. Así que, a su vez, tú, Josh, también has mamao de este tipo.
  • El incomparable John Frusciante, que también ha tenido sus movidas con las drogas y otras calamidades (sufrió daños tan importantes en sus brazos, debido a las heridas de chutes mal puestos, que hubo que hacerle injertos de piel que se llevaron por delante parte de sus antiguos tatuajes, como el famoso pulpo de su brazo derecho),  y que, para mí, después de Hillel, es el mejor de todos los guitarristas que han pasado por el grupo. (Es tremendamente duro ver lo que sus adicciones hicieron con él y lo que nos habríamos perdido si la hubiera palmado, a partir de 0:50).
  • Dave Navarro, joder, era de Jane's Addiction y a día de hoy uno de los amos de las seis cuerdas eléctricas. Con él se hizo el fabuloso One Hot Minute, les daba ese punto oscuro y peligroso que te pone muy, muy nerviosa. Y a saber qué podría haber pasado si no se le  hubiera ido la chota con la heroína y le hubieran echado de la banda.
Y para muestra, esta comparativa:




A tu favor, Josh, diré que tenemos que dejar de compararte con John, porque sois diferentes y no queremos una copia de John. Le queremos a él. Pero también te podríamos querer a ti igual, sólo necesitamos que te dejes de movimientos imposibles y le des caña de la buena a la guitarra. Concéntrate, queremos ver cómo te conviertes en una leyenda.

Creo que tu trabajo en I'm with you y The Getaway es muy bueno. Sólo tenemos que acostumbrarnos. Todos los discos de RHCP me gustan. Puede que tenga una especial querencia por One Hot Minute, vale, pero aprecio muchísimo toda la trayectoria y discografía de estos muchachos.

Te lo repito una vez más: deja las poses, queremos tu talento. Basta de pose emo. Odiamos el emo y no queremos odiarte a ti.

Y quítate el pelo de la cara, coña, que eres muy mono.

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el




Hora y media sin darnos un respiro y habiendo estado haciendo un air rockstar (lo que viene siendo viviéndolo como si yo estuviera sobre el escenario, bailando y desganiñándome como si me fuera la vida en ello)... ¡se acabó!.

¿PERO QUÉ INVENTO ES ESTO?

Se han saltado todo mi adorado One Hot Minute. Podría haber sido la leche hacerle un homenaje, que se han cumplido veinte años de su publicación. ¿Qué os costaba meter el Aeroplane por ahí? 

Pfff, un revival del Love Rollercoaster, por favooooooooooor. M-U-E-R-O.

¿Dónde carajo está aunque sea el Look Around del Stadium Arcadium? ¿Fortune Faded al menos?

¿Y EL MALDITO Y CLASICAZO UNDER THE BRIDGE DEL MAGNÍFICO BLOOD SUGAR SEX MAGIK?

¿Me estáis tomando el pelo?

"Aquí falta, esto no puede acabar así."

Pues acabó.

No la incluyeron en el set list de esa noche y a mí se me rompió un poco el corazón.

Ni baqueta de Chad, ni achuchón con Anthony. Ni una mísera pirueta dedicada de Flea. ¿Un espatarre guitarrero de Josh?

Así me fuí de allí, con subijón (subidón + bajón) que me tuvo confusa durante unas cuantas horas.

Red Hot Chili Peppers, esto no se hace. En serio. No se puede. Es como si U2 no tocaran With or Without you. ¿OS HACÉIS UNA IDEA DEL QUEBRANTO QUE ME HABÉIS CAUSADO?



Esto sólo lo voy a poder remediar yendo a otro concierto vuestro. #FACT

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el





Esta ha sido la tercera vez que les he visto. Y ha sido liberador. Las otras veces fui metida en relaciones que, una me destrozó y la otra no era el momento. Esta vez fui con un buen amigo y colegas suyos. Me ha encantado.

Pero que no hayáis tocado el Under the Bridge es imperdonable.

Anthony, exijo una compensación. Déjate crecer el pelo* y call me!


Ayo, ayo, ayo, ayo kiss this.


* y si no te lo dejas crecer, tranquilo que tampoco me importa mucho ;) ;)


Meanwhile in Mallorca

$
0
0
Desde el conciertazo de los RHCP, he tenido varios momentos musicales. Se puede decir que octubre ha cubierto mis ansias conciertísticas en gran medida, ya que, por desgracia, no he podido irme a Grecia de viaje como hubiera sido mi intención.

Ni siquiera a Canarias, que siempre es un lugar al que ya sabéis que me encanta volver. De hecho, hace un año, estaba yo ya de regreso de mi maravillosa estancia en Lanzarote. ¡Cómo lo añoro!

El caso es que no he podido contaros esos momentazos musicales que tanto me gustan, por el momento.

Paso por una etapa en la que la astenia otoñal me tiene anímamente hecha un trapo y digamos que se me ha juntado con un momento emocional bastante complicado del tipo "tenemos que hablar". Ya os intentaré contar.

De todas formas, os contaré más adelante de estos momentazos concierteros, porque hoy... ¡Ay hoy!

HOY es un gran día. Después de las lluvias ha salido el sol y sé perfectamente que es porque sabe, el sol, que hoy va a ser un día genial.

Bueno, todo el día no lo sé, pero sé que hoy a las 13:30 en la Fira del Disc Mallorca, mis adorados Hattori Hanzo Surf Experience presentan su nuevo disco, Meanwhile in Mallorca. Si el primero era bueno, Attácanos... con todo lo que tengas, ni os hacéis una idea de cómo suena su segundo trabajo.

Bueno, no, ¡BUENÍSIMO!

Y no es porque yo sea su FFF (Fan Fatal Forever), es que de verdad, Vicente Morella se lo ha currado de la hostia dándole forma al disco y ha quedado espectacular. El disco está en Spotify y deberíais escucharlo inmediatamente. Si te gusta el surf rock instrumental, me vas a dar las gracias y si no tenías ni idea de lo que era el surf rock instrumental, también me las vas a dar. Así que, anyway: DE NADA.



Pero claro, esto no es sólo porque esté muy emocionada por el nuevo disco. Que lo estoy, que conste. Es que esta vez... ¡LO HE DISEÑADO YO!

Mi cometido ha sido poner "en bonito" el estupendo trabajo de esta panda de gente maja que ama la música sobre todas las cosas.

Imaginaos mi sorpresón cuando me proponen algo así, ¡a mí!. Ninguna palabra define mejor lo que se me pasó por la cabeza cuando eso sucedió: HAMOOOOOOOR. Así, con hache aspirada y todo.

Después de un proceso lleno de contratiempos, hablo del mío, porque ellos, los pobres, también tuvieron los suyos y encima tuvieron que esperar por mí, todo se puso en marcha y hoy, POR FIN, presentan esta maravilla en la Fira del Disc Mallorca. Estoy que no me lo creo, como si yo misma fuera a estar en ese escenario dándolo todo, como lo van a estar dando los Hattori Hanzo Surf Experience.

Lo mejor de todo es que el disco está concebido para el formato vinilo, pero debido a que to quisqui quiere vinilos ahora, no iba a estar disponible. Así que se ha hecho un cd que será entregado con la entrada de la Fira.

Osssssea. Un vinilo y un cd. Mi diseño. Osssssseaaaaaaa.

¡Por fin os lo puedo enseñar! Este es el cd:





Y así va a quedar el vinilo, el cual no puedo esperar a tener en mis minimanos.


Portada, la he titulado: salvajes en remojo

Contraportada
De izquierda a derecha:  Jaume Blàquez (trompeta), Gabi "Sensei" Escalas (guitarra o el puto amo), Santi "Kalifa" Gil (bajo), Tuti Bezares (batería o aporreador de tambores), Pep Lirola (guitarra, máster crak de la organización y mejor persona) y Raúl Morán (trombón)



Llevo esperando este día... uffff... ¡imaginaos ellos!.

He propagado el eventazo de hoy por todas mis redes sociales y tengo la esperanza de que algunas de las personas que aprecio, y mucho, puedan venir. Porque ya no es sólo que haya tenido el honor de hacer, lo que yo creo que es mi mejor trabajo hasta el momento, es que estos bandarras se lo merecen.

Todos y cada uno de ellos han dado lo mejor de sí mismos para que este disco salga adelante. Pero tengo que darle un abrazo muy gordo a Pep Lirola, que se ha encargado de un muchimillón de cosas y ha estado ahí para revisar todo, todo y todo, animando, opinando y flipándolo. Pep, no te vas a librar de que cada vez que te vea te diga "a mis brazos".

De momento os digo que ya tengo el cd y, aunque no pude evitar diseccionarlo (deformación profesional), menos mal que soy una tipa dura, porque hubiera sido el momento perfecto para decir que se me había metido algo en un ojo. Y también en el otro.

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Si hoy queréis encontrarme, estaré bailando como si no me viera nadie en la Fira del Disc Mallorca, a eso de las 13:30 en el Palma Arena (sin corrupciones, ni sobornos de por medio). Entrada 5€ y os lleváis el Meanwhile in Mallorca de los fabulosos Hattori Hanzo Surf Experience, diseñado por la menda lerenda que va a reventar sus vaqueros de la alegría que la embarga en estos intantes.

Y después de esto, ya si acaso, me iré a que me den un valium a ver si se me pasa el subidón ;)



¡SI ME QUEREIH, VENIRSEN!

De mi piel p'adentro

$
0
0
Todo parece estar bien y, de repente, una chispa, un detalle, una palabra, un algo, hace que todo ese "todo parece estar bien" se vaya a la mierda.



Por desgracia soy de esas personas a las que les cuesta un huevo hablar de lo que pasa de su piel p'adentro. Y digo hablar, porque por alguna razón, la escritura me resulta más cómoda. Supongo que por eso tengo este blog. Como he dicho en otras ocasiones, es MI blog y contaré en él lo que me dé la real gana. 

Poco me importa quien que lo pueda leer. Aunque sé que os hace muchísima gracia cuando me pongo en plan despelleje, pero la verdad es que esa no era la intención primaria de este blog. Pero no pasa nada, la mayor parte del tiempo soy la persona sociable y que pone algún comentario sarcástico por aquí y por allá y a la que no le pasa nunca nada y está divinamente.

Pues no. Porque como ya he dicho, de lo que ocurre de mi piel p'adentro suelo guardarlo bajo siete llaves, unas cuantas capas de hormigón, toneladas de aprensión y un miedo atroz a que me hagan daño. Así soy yo, sencilla como el mecanismo de un chupete.

Y os estaréis preguntando, "¿Por qué SSG, por qué?". Desde hace una temporada, soy demasiado consciente de que el año que viene cumplo 30 (otra vez) y no quiero seguir así. Pensaba que a medida que cumples años, las cosas son diferentes. Pero resulta que hay veces que las personas seguimos ciertos patrones de conducta sin darnos cuenta y que, es complicado resolverlos, si alguien no te suelta un "quieto parao" y te abre los ojos. En mi caso, yo ya tenía sospechas pero, supongo que gracias a eso de cumplir años, ahora lo veo claro, clarísimo. Cristalino.

Y claro, si repites siempre el mismo proceso, ¿cómo coño vas a obtener resultados diferentes?.

Voy a hacer uso de la escritura para perpetrar una buena vomitona.

Siempre me he sentido muy sola, nenis. Y siempre he tenido un terrible sentimiento de no encajar en ningún lado. Y si unimos esas dos cosas, lo que te da son unas ganas horribles de tratar de adapatarte a las circunstancias, aunque te toquen los cojones a base de bien. Tú pones tu mejor cara y sueltas un "no pasa nada" con tu mejor sonrisa.

Luego, te vas a casa y lloras un rato, así como aguantándote, para que no te pregunten qué t'ha pasao y que, encima, te echen la bronca por ser tan estúpida.

Me he adaptado tanto que, para ser sincera, creo que estoy realmente jodida a estas alturas de mi vida. Y eso que sólo mido metro y medio.

Como dijo Jack El Destripador, vayamos por partes:

Mi primera pareja, jamás me puso la mano encima, pero ese perfil de maltratador psicológico lo clavaba. Que si llegaba tarde, dónde estaba, con quién iba, a ver si te piensas que los tíos son tus amigos, lo único que quieren es pegarte un polvo... Era de los que, cuando me iba a casa, quería que le hiciera una llamada perdida cuando llegara. Diréis, qué mono, ¿verdad?. Ya, quería que se la hiciera desde el fijo, no desde el móvil. Luego me di cuenta de que lo hacía para controlar que estaba en casa. No le hacía ni puta gracia si le llamaba desde el móvil, porque a saber si le estaba engañando. Me apartó de mis amistades, de hecho, se quedó con algunas de ellas. A día de hoy casi que se lo agradezco, porque menudo hijodeputafalsodemierda me quitó de encima.

Me llegó a decir, que si alguna vez lo dejábamos, seguramente él se enrrollaría con alguien antes que yo. De hecho, cuando ya no estábamos juntos, incluso me llamó para decírmelo. Más majo...

Yo sólo quería a alguien que me quisiera, quería ser como las demás, que tenían novios y yo no había tenido nunca ninguno. Quería que me quisieran. Cometí errores de principianta, me fie de gente de la que debería haber huído, pensé que tenía amigos. No voy a extenderme más, pero no eran amistades de verdad y yo era más gilipollas de lo que pensaba que ya era. Ojo, que yo también sé que cometí errrores, ¿vale?. Pero parece ser que yo no merecía ser perdonada por haber tenido un novio subnormal y haber metido la pata en varias ocasiones, mientras yo tuve que aguantar a sus rolletes/novios uno tras otro.




Cuando se acabó, no me di cuenta en esos momentos, pero me liberé. Pasé los siguiente meses levantándome para trabajar, incluso en algunos de mis días libres, iba a casa, me duchaba y me metía en la cama. Y sólo os cuento esto, porque creo que es suficiente para que os hagáis una idea. Y porque no estoy preparada para soltar todo, todo y todo lo demás aquí.

A día de hoy, más de cinco lustros pasado, y sé que ese cavernícola semianalfabeto me rompió. Tal cual, me rompió por dentro. Cogió mi cerebro y mi corazón, los pisoteó, se rio de mí y encima me obligó a verlo.

Sé que yo era joven y tremendamente esssssstúpida, crédula e inocente, pero no puedo evitar preguntarme, cómo dejé que me hiciera eso.  



Mis otras dos parejas oficiales, después de ese grandísimo cabronazo, tampoco funcionaron. Con uno, no era el momento más adecuado y con el tiempo nos dimos cuenta de que no éramos compatibles. Él me dejó, tuvo una pequeña crisis familiar y por más que yo quería ayudar, básicamente me apartó vía sms, versión 2.0 del famoso post-it de Carrie.

No duramos ni un año, pero yo tenía todo muy reciente con el cavernícola (por eso nunca debí comenzar una relación tan pronto) y supongo que necesitaba mucho que alguien quisiera demostrarme que no todos eran así (exacto, y por esto otro, tampoco debí comenzar una relación tan pronto). Evidentemente, no todos son así, pero en mi cabeza ya sólo me repetía "¿por qué a mí? ¿qué tengo de malo? ¿por qué no puedo fijarme en tipos que no quieran joderme la vida?".



El otro, el de después del que me dejó con un sms, fue de esas cosas que te calientan el corazón. Era la primera vez que yo sentía algo así: calor en el corazón. Estaba ridículamente enamorada, o al menos creo que era eso. No podía creerme que ese tío tuviera ganas de estar conmigo, me hacía sentir muy bien, y yo quería estar con él, hacíamos un montón de cosas. Cada vez que le veía era como si hubiera hecho un viaje espacial y hubiera pasado meses fuera: me moría de ganas por verle.

Echando la vista atrás, era todo muy estúpido. Estupidísimo. Muy gilipollas.

No digo que fuera un príncipe azul, pero si lo hubiera sido, de repente, empezó a desteñir. Como esas prendas que a-do-ras y que te niegas a ver que están hechas un cristo, pero te empeñas en seguir poniéndotelas. Yo me negaba a ver las manchas del desteñido.

Me pasaba una semana sin saber de él y, locurón, me preocupaba por él. Me preocupaba de la única manera que ahora sé que no tengo que hacerlo: enviando sms (los móviles seguían siendo tontos por entonces) cada cierto tiempo intentando conseguir una señal de vida, ya que las llamadas no las cogía.

Y diréis, "deberías haberte olido la tostada". Y yo os digo que, efectivamente, aquello empezaba a apestar a quemao, pero yo le quería, ¿sabéis?. Le quería como no había querido a ninguno antes. Tampoco es que tuviera un dilatado historial de conquistas, porque nunca he sabido cómo lidiar en este campo, pero ya me entendéis.

Un día, lo enganché, le dije que qué coño estaba pasando, me dijo que un día se levantó, se dio cuenta de que conmigo podría ser muy feliz, pero que ya no me quería. Salió de mi coche, se fue al suyo y punto pelota.



Mi coche era por aquellos entonces una jovencísima Minera. Debía hacer un par de semanas que la tenía. A finales de mes, experimenté el primer despido de mi vida laboral. Así que tenía un coche que pagar, el único tío del que me había enamorado me dejó y luego me quedé sin un curro con el que no podría distraerme de la ruptura, ni pagar mi nuevo coche.

Fui encandenando trabajos y rolletes sin futuro. Los trabajos los dejaba por otros nuevos, sin futuro igualmente. Los rolletes, como nunca fueron más allá de algo sssssúper esporádico, a los que incluso, no vuelves a ver tu puta vida, me importaba un carajo todo. Alguno hubo un poco recurrente, pero cuando no hay sentimientos, todo es diversión y era lo mejor.  



Durante mucho tiempo, ahora os voy a dejar toh locos, mantuve un algo muy raro con un tipo que tenía pareja. Estaba antes de cualquiera mis novios (uuuuuh, esa laaaaarga lista). Me pillé mucho, nenis. Excepto cuando estuve ennoviada*, el pille que tenía con este tipo era superestronguer. Pero a base de hostias repartiditas en el tiempo, me fui descolgando hasta que sólo fue algo un aquí te pillo, aquí te mato. Y si había cualquier tipo de atisbo de cariño o sentimientos, me encagarga de soltar algún zasca. Y cuanto más lo machaba, mejor. Ya que nunca dejó a su pareja, pero terminaba recurriendo a mí, qué menos que soltar un poco de veneno de vez en cuando.

Lo que pasa es que no me daba cuenta que también me envenenaba yo.

Aquello fue algo muy loco que duró demasiado tiempo. Durante unas temporadas dejé de hablarle. Pero de alguna manera se las arreglaba para "encontrarme". Y ya, supongo que mis zascas no los aguantó más, y fue él quien dejó de hablarme. En cierto modo, ya era un poco hora. llevábamos jugando a esta puta mierda desde finales de los 90, ¿sabéis?. Por el momento, más tiempo de lo que él lleva casado con esa pareja que nunca dejó (yo misma me doy permiso para lanzar este zasca).

Y así ha transcurrido más de una década. ¿Ves esta raya? Pues como intentes sobrepasarla, te cruzo la puta cara. Este era mi plan.

Hasta que hace poco, sin darme cuenta, alguien la sobrepasó. Y no lo vi hasta que ha sido tarde.

Las condiciones que había, tampoco eran las ideales, pero yo no les di importancia, porque, eh, yo me adapto. ¿Qué iba a pasarme por adaptarme una vez más?.

Me he adaptado a:
  • mamones que me lo han hecho pasar putas en el trabajo y a los que espero que el karma les dé por el culo con una piña.
  • capullos que me preguntaban en entrevistas para unas prácticas no remuneradas, qué cómo es que a mi edad no tenía hijos y/o no pensaba tenerlos.
  • amistades que siempre te dicen eso de "tenemos que vernos, te echo de menos", incluidas las que también añaden un "eres una de mis mejores amigas", pero luego tienes que echar una instancia para quedar mientras ves su facebook lleno de fotitos de quedadas con sus amiguis chachis de vinos, de viaje, de fiestas después de rechazar ir a tu cumpleaños...
  • amistades que orbitan alrededor de sus parejas, ¡cuántas veces lo habré puesto por aquí, por diorrrrr!. Sólo se acuerdan de mí cuando están de "rodríguez", que viene a ser cuando sus parejas están de viaje o tienen planes con sus amigos. Entonces, oh sorpresa, se acuerdan de mí y, cuando alguna vez he dicho que no, ha sido como una ofensa.
  • sujetos que, sin tener el más mínimo reparo, reconocen que tienen churri, pero te entran igualmente. Llega un momento en que te planteas, ¿en qué momento les han cambiado el cerebro por una mierda muy grande?. 
Y me hice la loca, en plan, esto me importa un carajo. Esto es lo que es y va a durarme lo mismo que una camiseta blanca limpia: cerocoma.

Nos llevábamos gustando desde hacía tiempo, sin saberlo el uno del otro. Me pareció todo muy cuqui. Pero también tenía pareja. Seeeeeh, esa soy yo, tropezando con el Everest de nuevo.

Pero la dejó. Por primera vez en mi nefasta vida ¿amorosa?, un poquito de cordura viniendo del otro lado. Como quien no quiere la cosa, se notó que ya no había esa tensión en el ambiente.

Para mi sorpresa, aquello se alargó más de lo estimado en un principio. Y para entonces la raya ya estaba cruzada. Ni me dio tiempo a abrir bien la mano para dar un buen bofetón.

Y, de repente, notas comportamientos distantes. Cierta incomodidad en algunos momentos. Que, de estar flipada porque esa persona propone planes para hacer juntos, ahora se despide de ti con un "hasta la semana que viene". Sin opción a más. Excusas que son mentiras. Tanto, que le pillas en más de una. Pero no dices nada, porque recordad que yo me adapto a las circunstancias ;) ;) Que de repente te des cuenta de que algo dentro de ti te dice que eso sólo puede significar que hay otra. U otras. Eso da un poco igual. Lo que importa es que te sientes absurdamente gggggggilipollas por haber roto tu racha de más de una década sin dejar que nadie se acerque a ti para que, cuando reúnes un poco de valor, después de ensayarlos varias veces, para decir "no quiero ser sólo la chica de tal día a la semana, me gustas y no puedo seguir así", él te diga "sé que quieres que pasemos más tiempo juntos, pero yo no quiero estar con nadie".



Si habéis leído todo lo anterior, creo que es más que comprensible que ahora sólo quiera darme de cabezazos por haber sido tan tooooooooonta. Voy a repetírmelo de nuevo por si no me ha quedado claro: TOOOOOOOOOOONNNNNNNTAAAAAAA.

Es cuando te das cuenta de que tu patrón de conducta no puede ser más evidente. Me he adaptado a condiciones y/o situaciones que no me gustaban por no perder/dejar de ver a personas que no me daban más opciones. Porque, como he dicho antes, siempre he tenido dentro de mí un fuerte sentimiento de soledad y de no encajar.

Por lo que sea, yo no he crecido rodeada de familia, las mudanzas no ayudaron a que me sintiera perteneciente a ningún lado, un grupo o algo así. Me he esforzado mucho por encajar, con más o menos éxito. He querido involucrarme con grupos o personas que me parecían interesantes, que me atraían, pero por unas cosas u otras, de alguna manera terminaba entendiendo que eso no iba a pasar si la otra parte no ponía el mismo interés. Es cuando ya dejé de intentarlo, cuando en un momento mi cabeza hace click y decido que es mejor dejarlo.

A veces me he llevado agradables sorpresas, pero la mayoría han sido rotundas decepciones. Varias veces he comentado lo que me cuesta aceptar que algunas personas no están destinadas a estar en mi vida para siempre y que sufro una especie de luto.

Personas que, en la mayoría de los casos, han terminado haciéndome daño, ya sea consciente o insconcientemente. Pero que, al fin y al cabo, he sido yo la que se ha llevado la hostia.




Supongo que también me di cuenta en algún momento, que eso también implicaba que yo tampoco iba a estar en sus vidas. Con la diferencia de que, probablemente, a mí me importara y a esas personas les sudara la polla.

Paso por un momento, llamémoslo existencial, un poco en crisis. He sido rechazada, again, por alguien que me gustaba. Después de tanto tiempo, por fin alguien me gustaba. Anyway, me siento mal. Estoy triste, estoy llorando mucho en las últimas semanas y, aunque tengo un montón de historias que contar sobre mis momentos musicales de este mes, que he asistido a unas charlas estupendas** y que me apunto a cosas para no estar en plan...


... En realidad no me apetecen nada y sólo las hago para no llegar a un punto al que no quiero volver.

Quiero que me quieran y quiero querer, como cualquier otra persona. No soy un puto bloque de hielo, aunque quisiera serlo. Pero a día de hoy, ya sólo me conformo con que no me hagan daño.

Por favor.

Mi amiga RuPaul tiene taaaaanta razón...







* Vale, confieso que una vez besé a alguien mientras tuve una de esas parejas, no me gustó la sensación de después. Nunca más volví a hacerlo.

** En algún momento os lo contaré, sé que hay que escribir sobre las cosas lo más pronto posible, por eso de aumentar visitas en el blog y tal. Pero este blog le importa un pepino (= una mierda) a la mayoría de la población y yo no gano nada con esto, así que seguiré con mi tónica de escribir cuando me salga de las narices.

Un resumen

$
0
0
Que en mi anterior post os haya explicado mi pesadumbre, no implica que haya estado sin hacer nada.

Bueno, no todo el rato. Un poco de ermitañismo y de esconderme sí que he tenido. Pero he intentado obligarme a no caer a niveles muy profundos.

Entotá, que os cuento un poco las cosas chachis que he hecho y que me han salvado bastante de acabar un poco así:



Después del conciertazo de los RHCP, me avisaron de que O Sister venía de concierto. El mismo día que me lo cuentan. De alguna manera, los planetas se alinearon y pude ir.

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Yo de bailar swing, ni zorra, está en mis planes, pero aún así me lo pasé bomba viendo a la gente bailar y escuchando buena música. Venían a presentar su último trabajo, Stompin' in Joy. Sonaron geniales y encima es que son remajos.


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Me alegré de haber ido y, sobre todo, de que se acordaran de mí y me avisaran para ir a verlos. Un gustazo pasar ese rato de buena música con compañía chachi y, de paso, distrayéndome un poco.

Unos días depués, asistí a un taller de ilustración, con Miteta, que por unas horas también me estuvo manteniendo ocupada y concentrada en hacer cositas cuquis. Quiero especializarme en pin-ups de generosas curvas, pero de vez en cuando hacer ballenas sonrientes, tampoco está tan mal.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Supongo que ya no me volveré a poner un bikini hasta el año próximo, pero aquí en octubre y, por lo que llevamos de noviembre, aún se puede ir a tomar el sol a la playa.



Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Seguí dando la paliza para que la gente fuera a ver la presentación oficial de Meanwhile in Mallorca de mis queridos Hattori Hanzo Surf Experience en la Fira del Disc Mallorca.



Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Y por fin llegó el día:


Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Decir que estuvieron espléndidos, es quedarme muy corta. Y no es porque yo sea su FFF (Fan Fatal Forever), es que es verdad verdadera. Chimpún.

Moví las chichas como si estuviera yo sola en casa en plan maruja. Con la peculiaridad de que entre el púbico también estaba mi señora madre. No suelo hacer estas cosas delante de SSMom. Jamás me ha visto darlo todo en un concierto.

A día de hoy creo que SSMom todavía se halla en un estado de incredulidad supina. Pero me da igual, más incrédula estaba yo cuando me dijo que le gustaría venirse.

De alguna manera conseguí que varias personas vinieran y, fueron tan amables de grabarme con el móvil mientras parecía que me daba un ataque epiléptico.

Amigos... ¬¬

Aún así, pensaba que acabaría yendo sola y al final estuve rodeada de personas maravillosas que cedieron a mi pesadez :-P

Después del subidón, me apunté al Setfonts 2016. Una semana dedicada a la tipografía y el diseño, que por primera vez se celebraba en Palma. Estas cosas chulas no suelen pasarnos. Es lo que tiene cuando vives en una isla, que el hecho de vivir en una isla, es como si a todo el mundo le diera pereza venir a hacer cosas guays. Por eso estamos muy habituados a tener que coger un avión/barco para irnos a ciudades grandes donde muchos artistas sí tienen la deferencia de pasarse.

Una de las actividades a las que me apunté, fue a un safari tipográfico con Damià Rotger, un tipo fantástico, amante de la tipografía y autóctono de las Balears. Dúctil es su estudio y se hace unas curradas brutales para crear tipografías. Nos lo explicó en su charla durante el fin de semana y... ¡madre mía! No sabes muy bien si es pasión u obesión o al revés o todo. Muy loco.


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Para mí, uno de los principales reclamos del Setfonts 2016 fue que venía Iván Castro. Digámoslo así, viene a ser como un rockstar dentro del lettering, igual que Damià lo es de la tipografía.


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Y supongo que es porque compartimos generación o algo así, pero ver que le fascinaba las letritas de tebeos que yo también tenía cuando era pequeña... Una se siente moderna.

Tuvimos charlas de diferentes estudios y diseñadores, los cuales te hacen sentir muy, muy pequeñito en esta profesión. Que no paras de preguntarte cómo carajo se les ocurrió tal o cual cosa y que eches una mirada a lo que tú haces y digas... No soy digna.

Lo Siento Studio, Atlas Design o Senyor Estudi son de esos que, al mismo tiempo que te maravillan, hacen que te plantees si deberías vender tu Mac y empezar a dedicarte a doblar camisetas mientras miras con cara de asco a las que tienen más de una 38 (respect a todos los que se dedican a doblar camisetas mientras miran con asco a las que tienen más de una 38).

Y luego estuvo Manuel Sesma, que te dice que la tipografía no es escritura, sino un sistema programable de piezas combinables que pueden ser letras. O no.

¡BOOM!

Hala, y ahí te quedas con el culo torcío.

Y en menos de una hora, en cuanto acabaron las charlas, me vino a buscar Doña Caye para ir a ver, cantar, bailar, reír y disfrutar el Rocky Horror Picture Show.


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Donde me lo pasé tremendamente bien soltando un montón de tacos con el pelo mojado e intentando seguir las letras del karaoke. Más que nada porque había visto escenas sueltas, pero nunca había visto esta peli de culto en su totalidad. La "descubrí" a través de Fama, cuando dos de sus protas van a verla al cine.

Esta es la única canción que más o menos me sabía entera.





La bolsita de accesorios que te da el Sing Along, incluye una pistolilla de agua estupenda que me proporcionó la foto para mi retonno a mi muro de FB, después de haber estado una semana (repito: UNA semana) de sielncio y decaimiento generalizado en todo mi ser.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Foto realizada por doña Caye y ajustada por mi pequeño iPhone 5S, que aunque antiguo, sigue siendo de muchísima utilidad.

Un algo así como, "yo de esta salgo, pero de momento me quiero morir un poquitito".

Además, fue lo más cerca que estuve de disfrazarme para Halloween. Un año más, nada de nada. Y, a pesar de que un tiempo atrás, pensaba que esta fiesta que venía de fuera, debía quedarse fuera... Mirad que os diga: ¡VIVA HALLOWEEN! ¡VIVA EL DÍA DE LOS MUERTOS! ¡A LA MIERDA LA PUÑETERA NAVIDAD!

Me declaro jalogüinista, pega mucho más con mi personalidad, esa a la que le gusta pintarse como una puerta, elegir entre pelucas y que, si en su próxima vida le toca se hombre, quiere ser drag queen, nivel Ru Paul.



A parte de pasar tiempo con mi Frida, que en nada cumple un año y está más salvaje que nunca,...


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

Que no os engañen las apariencias, tiene pinta de adorable, pero es bruta como ella sola.


... ya está.

Hace un par de posts...

$
0
0
... os contaba un poco más sobre mí. Cosas que, de alguna manera toqué por encima, y ahí me desquité un poco.

En el siguiente post, os conté que aunque las cosas duelen y yo estoy en medio de esa pupita, decidí que no iba a dejar que mi desánimo hiciera que mi vida se parara.

¿Y qué os voy a contar en este post? Pues un poco cómo va progresando la cura.

He seguido haciendo cosas. Todavía tengo momentos mega-moñas en los que tengo la bajona presente. Como no queriendo perder su estrellato. Pobre, puede que me haya puteado de un tiempo a esta parte, pero creo que no se ha enterado de que si algo no me interesa, me aburre a muerte y lo abandono. No soporto el aburrimiento y esta bajona ya me tiene un poco harta.

Oficialmente, desde hace unos días, ha llegado el frío a mi ciudad y ya sabéis que las cosas me cuestan más cuando hace fresquete. Aún me encuentro alguna vez con un mini-ataque de llanto essssstúpido que me cabrea un montón, porque me hace sentir mmmmy gilipollas.

¿Qué queréis que os diga? No ser correspondida duele. Pero como tengo algo de  experiencia lidiando con estas cosas, lo mejor que puedo hacer es mantenerme ocupada y poner distancia.

Una amiga me invitó a comer y me preparó un curry verde de esos que me gustan taaaaanto y por los que yo ma-to.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Frida cumplió 1 año y, como no pude pasarlo con ella, me dediqué a enviarle vídeos cantándole el cumpleaaaaaaños feeeelizzzzz y repasando el muchimillón de fotos que tengo de ella. El mes que viene hará un año que llegó a casa, y esta es una de sus primeras fotos. Cuando era una bolita peluda, suave y... salvaje, porque incluso de diminuta era una salvaje.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el

La quiero más... Puedo estar muy triste y sin ganas de nada, pero es verla, espachurrarla y decirle trescientas veces que deje de saltar, y se me quita toda la gilipollez.

Luego, en un alarde y chute de autoconfianza, me hice unos cuantos selfies y este fue el único que salvé de la criba, previo paso por corrección de luces y esas cosas que ningún instagrammer reconocería: filtros, filtros, que eso es lo que les jode.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Alguno me ha dicho que tengo cara de "pilladora". Yo creo que más bien es de "no me hinches las pelotas". Pero bueno, opiniones, haberlas, haylas.

Me apunté a un taller de papercut con Jose A Roda, con una nueva amiga que he hecho que es un sol de maja, y fue genial. Lo pasé divinamente y, a pesar de que me apunté por no quedarme perdiendo la mañana en casa, fue una idea estupenda y me alegro mucho de haber asistido.

Además, Jose es encantador, muy simpático y aprendimos mucho sobre el papercut.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Y eso sin contar, que me encaaaaanta su obra y que en todas sus chicas haya tetas, tetas, tetasssss.


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Además, lo que tienen las cosas, de repente, y como quien no quiere la cosa, me entero de que el karma existe. Que algunas veces es un poco malévolo y que para abrir los ojos a las personas, les hace pasar por unas putadas muy gordas. Pero cuando te enteras de algunas cosas... os juro que sólo pensar en que el tiempo me ha dado la razón... que no estaba exagerando, que no estaba loca... La sensación fue magnífica.

Y, con un poco de suerte, de ahí puede que haya salido una buena persona que se ha cruzado en mi camino gracias a un ser con un cabronismo pasivo-agresivo muy desarrollado.

También he desayunado churros con chocolate con dos personas maravillosas y su perrete.

Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Y después nos dimos un paseo por la playa.

Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Vamos, que la vida sigue y yo no estoy tan mal como para no disfrutarla aunque a veces esté triste y no pueda hacer nada para evitarlo.

¿Y sabéis por qué? Porque este sábado mi querida Fle se casó con su Ha y eso me ha hecho muy feliz. Pocas personas he tenido el placer de conocer que sean tan positivas, incluso habiendo pasado por muy malos tragos. Si ella puede hacerlo, si ella puede lucir su hermosa sonrisa y repartir chispitas de amor con esos ojazos que tiene... ¿cómo no voy a poder yo seguir adelante por muy triste que me encuentre?.

Recuerdo cuando me contó cómo se conocieron, ella y su Ha. Me pareció una historia pisiosa y le dije un día que eso que tenían, hacía que yo, la rancia por excelencia, no pudiera eliminar toda posibilidad de creer en el amor.

Las pocas veces que les he visto juntos, se les nota. Y es una maravilla. Ni siquiera te atreverías a decir que lo suyo es tan bonito que dan asco. A ese nivel están.

Mis más sinceras felicitaciones para Fle y Ha, Ha y Fle. Y para PequeBe, porque cuando se dé cuenta de la suerte de padres que tiene, lo va a flipar mucho. ¡Ay omá, que la Fle s'ha casao!

Fle, desde la distancia, pero siempre en un cachito de mi corasao...



¡Ah! Y también tengo que contaros que, aunque hace poco que los conozco, me he hecho fan de Los Bengala y llevo desde la semana pasada dándole caña a su música.

Aquí la canción que me ronda por las neuronas persistentemente desde entonces.



180 gramos

$
0
0
Eso es lo que pesa el vinilo del Meanwhile in Mallorca de mis queridísimos Hattori Hanzo Surf Experience. Porque sí, ¡YA TENGO EL MÍO! (Y tú también puedes tener el tuyo por 10€ poniéndote en contacto con ellos aquí, y de paso, te haces fan jijiji).

Fue alucinante ver cómo salía de la caja, unos nerviossss, luego tenerlo en mis manos y ver que todo estaba bien. El acabado es buenísimo, los colores han quedado tal y como yo los tenía preparados. Y bueno, los materiales de una calidad excelente. Después de tanto sufrimiento en la grabación, la mezcla, algún accidente por medio, mis movidas con otros trabajos que retrasaron mi labor... ¿Qué queréis que os diga? Fui fuerte y no se me metió nada en ningún ojo ;) ;)

Pero es que, si encima te lo dedican... decir que se me cae la baba con mi nuevo vinilo, es quedarme demasiado corta.




Me mmmmmuero de la alegría. Puede que os parezca una solemne chorrada, pero cuando un diseñador tiene la suerte de poder participar en un proyecto molón, es que no hay palabras. Y yo no las tengo, porque si hay tres cosas en el mundo que me gustan son el diseño, el verano y la música. Y si es rock, es la perfeccción.

Para los Hattori Hanzo Surf Experience, imaginaos lo que ha tenido que ser tener su magnífico segundo álbum en las manos. Me dan una envidia muy gorda. Me da envidia verlos tocar y disfrutar de sus creaciones. Ay, ya lo sé, ya, habla la mega-FFF (Fan Fatal Forever) que soy. Pero no lo puedo evitar, porque cuando ya no es que te guste, es que algo te apasiona, pues qué queréis que os diga. Que la cabra tira p'al monte y en esto no creo que vaya a cambiar en lo que me quede de vida.

Bueno, bueno, bueno... pero es que además, el mismo día que llegan por fin los vinilos, yo había recogido mi antiguo tocadiscos, que llevaba muerto de la risa desde hace eones. El pobre, estaba conectado a una cadena que se estropeó y desde entonces mis vinilos estaban criando pelusas. Y yo, mientras tanto, comprando más vinilos. Menudo cuajo tengo.

Total, que fue una señal. Si el vinilo me lo dieron por la noche, lo primero que hice esta mañana fue poner el disco y escucharlo con el volumen apropiado.

Tal como he dicho por mis redes sociales, teniendo 180 gramos de Hattori Hanzo Surf Experience, ¿quién necesita café por las mañanas?



180 gramos es lo que pesa el vinilo, que en cualité vinilística es la más alta, yeah!
Las cosas se hacen bien o no se hacen, copón.

Por supuesto, toooodo el disco lo he escuchado infinitas veces ya, así que con el vinilo fui directamente a mi tema preferido: Kashyyyk Beach Party. 

No podía ser de otra manera, teniendo en cuenta que Kashyyyk es el planeta de mi ex. Ya sabéis, Chewie. Para que os hagáis un nivel de frikismo que también arrastra esta banda de tunantes.

Que conste que me gustan todos los temas, ¿eh?, pero éste es mi pequeña debilidad y lo pienso bailar a tope cada vez que lo escuche en los conciertos.

Vale, y cuando suene en casa también.

Pero, ¿sabéis qué?. Que ahora que ya mi trabajo ha finalizado (y que pienso poner en mi portfolio de Metro&medio y en mi Behance), me da pena. Como diseñadora y como rockstar frustrada. Para ellos ha sido un camino largo y ahora toca cosechar todos los éxitos de su esfuerzo. Pero para mí... ya está, se acabó y me encantaría seguir trabajando en estos temas.

Quiero que sepáis que los HTTH ya suenan por muchos programas especializados en el surf rock. Es cuestión de tiempo que el mundo me dé la razón y se conviertan en una banda de surf rock instrumental de primera línea y de referencia.

Estoy agradecida por haber podido participar en algo así. Veo la portada del vinilo, la galleta del vinilo, la contraportada, escucho el disco y me encanta. Y lo he hecho yo. Y no le me lo puedo creer. De alguna manera el universo me ha dado esta maravillosa oportunidad de unir la profesión que tanto tiempo me ha costado ejercer con una de mis pasiones, el rock.

Joder, que estoy muy contenta y que, después de tanta histeria pensando si saldría todo bien, anoche dormí genial.

Megamix

$
0
0
Un torbellino de emociones. De esas que a mí tanto miedo me dan y tan hasta el coño me tienen, joder.

Porque es así y no he tenido problema ninguno en reconocer que yo no soy persona de emocionarme, ni de "esas moñadas" como siempre digo.

Odio mucho que, por ejemplo, la gente me vea llorar. Tampoco me gusta que me vean triste o de bajona. Por eso soy de esas personas que se recluyen hasta que se les ha pasado lo que sea.

Yo recurro mucho a eso del "ya se me pasará". Le quito importancia, porque si los demás se lo creen, al final me lo termino creyendo yo. Es una manera como otra cualquiera de apartar a la gente para que estar solitariamente recluida y de barrer bajo la alfombra.



Mi alfombra ahora mismo no toca mucho el suelo, la verdad.

De un tiempo para acá noto mucho eso de ir cumpliendo años. No por problemas físicos (que los tengo, joder, ahora tengo que alejar el móvil como hace mi madre para poder leerlo... ¡y de aquella manera!), me refiero a esas putas emociones que parece que me están desbordando. A veces, muy a tope. Muy harta me tienen.

En los último tiempos paso de una tristeza muy, muy, mmmmmmuy moñas a estar bien, todo muy razonado y racionalizado y... pues eso, con mis cosas.

Lo más duro de cuando estás triste, es tener que ocultar esas cosas de tu alrededor que te recuerdan momentos muy buenos, sensaciones muy buenas, darte cuenta de que lo que antes creías que no te molaba mucho, ahora resulta que te sorprende porque has encontrado esa manera en que sí te gustan y ahora entiendes a qué se referían los demás y, una vez perdidas, las echas mucho de menos. Recuerdas cómo llegaron esas cosas a ti y es inevitable ponerte muy gggggggilipollas.



Por suerte o por desgracia, disfruto de bastante tiempo que me deja lamentarme y autocompadecerme todo lo que mi cuerpo y mi mente me piden. Me cuesta ponerme en marcha, aunque, buenas noticias, me marco metas y parece que voy cumpliendo. Poco a poco, pero voy cumpiendo.

Esto no viene sólo por un reciente y desafortunado encuentro o conversación. Ni siquiera por sospechas fundadas, gestos, excusas, comentarios, mentiras... Supongo que es un conjunto de todo desde hace un tiempecín. Supongo que de alguna manera mi cuerpo me viene indicando que algo iba a pasar y, en cierto modo, lo he estado evitando, por muy inevitable que fuera.

Pero es que cuando te das cuenta de que, como he dicho antes, algunas cosas te sorprenden porque ahora te encantan cuando en el pasado no las soportabas y, lo peor, que las añoras muchísimo, duele muy acojonantemente.

Es la sensación de pérdida, como de pena, como de incertidumbre por si alguna vez recuperarás esa sensación. Y tampoco sabes si la quieres a cachos, porque entontces no sería lo mismo.

Muy raro.


Otra buena noticia es que en el pasado hubiera estado pensando todo el rato si es que hay algo malo en mí o si es que no soy suficiente. De hecho, lo he pensado y lo he dicho esta vez. ¡Pero es que no me lo he creído! ¡Y es flipante! Yo antes me hubiera dicho de todo a mí misma, hubiera buscado qué he hecho mal, qué he de hacer para ser más que suficiente... y hubiera entrado en un puto bucle de auto-sangramiento emocional.

Bueno, pues una de las ventajas de la puta edad es que sé perfectamente que:
  • NO soy mala persona
  • SOY mucho más que suficiente

Tal cual. Ahora no sólo me lo repito para salir del apuro, AHORA ME LO CREO.

Y aunque me cueste aceptar el hecho de que, por mucho que yo quisiera, los demás no tienen porqué creerse eso de mí (en las diferentes facetas de la vida), me la tiene que pelar. Me costará más aceptar esto en algunas personas más que en otras, pero yo tampoco puedo parar mi vida por esto. Bastante he estado paralizada por sentirme menos y, lo que es mucho peor, dejar que hicieran que me sintiera menos. Y lo digo por los tremendos hijos de puta que hay por ahí sueltos (de ambos sexos), por los cuales he podido o no sentir algún afecto*.

Como veréis, estoy en modo introspectivo. Otra vez, la buena noticia, para vosotros, es que solo lo sabéis de un par de posts para acá. Pero yo llevo lidiando con esto hace ya un ratito. ¿Por qué? Ni idea, parece que mis épocas de crecimiento personal ocurren cada 3-4 años aproximadamente, por lo que he podido investigar.

Duele, todo esto me duele mucho. Siento que, aunque nunca fue algo "seguro", me falta algo. Porque yo tenía las cosas muy claras, pero en algún momento se empezaron a difuminar y de esos polvos, vinieron estos lodos. Jajaja no puedo evitar reírme... ains... tontadas mías.

Desde luego otra cosa que he aprendido es que que con los "es lo que hay" o los "creo que", al igual que la frase "la vida son dos días" mal entendida, hay que ser muy cuidadoso. Esas frases las carga el diablo y si se disparan a la ligera, a la larga puedes hacer mucha pupita. En serio, no las digáis a la ligera.



Y hasta aquí la evolución revolucionaria de mis emociones que me tienen saturada cual maldito megamix veraniego.


Pero me despido con musicón del bueno. Alguien tiene que compartir lo bueno.






* y me refiero a afecto no sólo amoroso, sino como amistad, simpatía y tal.

A lo alto, no

$
0
0
Me cuesta concentrarme en las cosas. Estoy muy dispersa de un tiempo para acá. Tardo un ratito en pillarle el rollo a las cosas y me cuesta arrancar. Y como me cuesta arrancar y sé que voy a tardar un rato en pillar el rollo, me agobio y al final, nah de nah.

Es un peñazo y un maldito círculo vicioso. Porque siempre he sido de las de, si me tengo que poner, me pongo. Pero ay ahora...

Cuando estás en pleno crecimiento personal todo es un puto caos. Al menos para mí. Todo se me desbarata y no me da miedo la improvisación, tengo varios máster en improvisación, pero uuuuufffff... en pereza tengo una cátedra.

Para lo único que últimamente parece que me centro es a la hora de hacer fotos para mi instagram.

Sí, lo sé, suena gilipollas a tope de power. Real como la vida misma, nenis.

A ver, cada uno afronta sus cambios y crecimientos personales como le da la gana y la mía es esta.

Tengo ahí una preferencia muy marcada por la comida y mi Frida. Luego las palmeras, la playa y los grafitti.

Aunque
últimamente más la comida. Pero quiero que sepáis que no me paso el día zampando. Que aunque lo hiciera, os lo diría igual. Pero no. Pasar por chorraditas del corazón me quitan el hambre. Y la gula. Que me permití comprarme una tableta de chocolate de las grandes y ahí está, en el cajón, con algunos cuadraditos menos, pero casi entera.

Creo que incluso he adelgazado. 

La verdad es que no lo sé, porque escondí la báscula. Pero si SSMom dice que he adelgazado, y ella no es de decirme esas cosas, debe ser que sí.

Va a ser verdad eso de "no hay mal que por bien no venga".

Y nada, os muestro unas cuantas de mis fotos, en conmemoración de mis 666 seguidores (por lo menos, a día de hoy).


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Un vídeo publicado por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


He pasado días sin salir de casa. He estado aparentemente bien. Todo muy normal. Sin venir a cuento, el llanto se ha desbordado de mí misma. Muy en plan "te vas a enterar, guapa". Y con las mismas se ha parado y he seguido estando aparentemente bien. Los días nublados me han afectado, me han hecho más lenta. Los de sol me han sentado estupendamente. Llevo unos días saliendo a pasear y manteniendo el tipo con quien tengo que mantenerlo.

He estado un poco off aquí y allá. Pero no ha dejado de sorprenderme que hay gente que de vez en cuando aparece por mi whatsaap para preguntarme cómo estoy.

He quedado con personas nuevas con las que me gustaría consolidar una buena amistad en el futuro. Sí, más gente nueva, pero está bien. Reconozco ante todo el universo que, aunque dije que yo quería que mis amistades "de siempre" fueran las personas con las que me gustaría pasar más tiempo, aprecio la suerte que tengo de poder hacer amiguis con cierta facilidad.

He escrito mucho para mí. He ordenado, limpiado, reorganizado y donado cosas. Aún no he acabado. Porque es verdad eso de que deshacerse de cosas que no necesitas es bastante adictivo. Y que cambiar cosas de sitio, me relaja mucho. Como cuando te haces un tatuaje. Que, por cierto, estoy empezando a bocetar en mi cabeza el siguiente tatuaje que me quiero hacer. No será inmediatamente, porque siendo una mantenida del Estado, tengo otras prioridades. Pero ya tengo el sitio elegido.

También he pensado en eliminar alguno. O parte de alguno. Ya no significan lo mismo que en su día. Esas cosas que te pasan cuando creces.

He ido a que me cortaran el pelo. No me he rapado, pero no me llega el pelo para una coletilla. Veré si me da por teñirme. Pero eso no lo tengo claro porque no me veo ni rubia, ni pelirroja y los colores extremos requieren de un tiempo de cuidado que no estoy dispuesta a malgastar en eso.

Y no sé, nenis, siento si últimamente estoy muy aburrida. Pero ya sabíais que en este blog se trata más de mí, mí, mí, mí que de nadie. Tengo que ponerme seria e intentar entrenar mi paciencia. Qué más quisiera yo que poder asimilar que algunas de las cosas que me pasan son por algo y he de ser paciente. Ser una persona impaciente es parte de mi sufrimiento personal. Envidia me dáis las personas tranquilas y que saben esperar. 

No me considero especialmente tranquila, más bien tengo épocas de aburrimiento. La impaciencia me produce aburrimiento y, por consiguiente, amuermamiento. Esa es mi lucha. A veces me dejo medio ganar hasta que hago una remontada. En algunas ocasiones más épicas y espectaculares que otras, cierto.

No paro de hablar de "crecimiento", maldita sea, es todo simbólico, porque crecer, crecer, nada de nada de a lo alto. Metro&medio forever y 35 de pie ¬¬

En estas ando. Poco a poco. 



No quiero acabar el post sin compartiendo mi amor por Los Straitjackets y lo muchisisisisisssssssssísimo que me gustaría saber hacer lo mismo que Angie Pontani.



A falta del bis

$
0
0
Hace ya unos días que estamos en diciembre, oficialmente ya comezó la cuenta atrás para despedir el año 2016.

He pensado en hacer un repasito de lo que ha sido mi año. Sí, sé que aún pueden pasarme más cosas. Seguro, pero bueno, ya si eso hago un bis de este post.

Enero 2016:

  • Os presenté a mi pequeña Frida, cuando era una cachorrilla adorable-ble e hiperactiva. Mucho. Y también os presenté a Conchita, mi nuevo coche, que en realidad estaba ya conmigo desde septiembre, pero bueno... como que aún echaba mucho de menos mi querida Minerva.
  • Le pedí a los putos reyes que me trajeran unos rotuladores Copic. Aún los sigo esperando 😒
  • Os conté sobre los Golden Globes 2016.
  • Seguía buscando un trabajo, para irme de uno en el que yo veía que la cosa se iba a la mierda y tenía mis dudas sobre si ser una diseñadora puramente creativa o meterme en berenjenales de códigos que para mí son tan imposibles como las putas matemáticas cuando estaba en el cole.


Febrero 2016:

  • Os conté lo bonicodeltó que estuvo mi Bruno Mars en la Superbowl, dejando en bragas al atontao de es grupo que odio a muerte y que no pienso mencionar. Beyoncé también estuvo bien, vale, pero me dio muy igual. 
  • Y me pasé por el forro los Goya 2016 


    Marzo 2016:



      Abril 2016:

      • Estaba muy hasta el coño de todo. 
      • No me dio la gana escribir sobre nada.



      Mayo 2016:

      • Estuve en Cracovia, Helsinki, Tallin, Gatwick y Brighton. 
      • Cambié de trabajo, ¡por fin!, y mis compañeros de entonces, me hicieron unos regalicos monísimos, recibí imeiles súper chulos de todas las oficinas y me fui contentísima de quedarme sólo con lo bueno y haber podido mandar a la mierda a algún gilipollas y su estupendismo encubierto de cabróndemierda. Mi trabajo fue agradecido y alabado, un montón de gente me mostró su cariño y eso es lo que queda. 
      • Comencé una nueva etapa en un nuevo lugar de trabajo que me hacía mucha ilusión. Tuve una época muy social y seguí recordando a mis compaños de mi antiguo trabajo.



      Junio 2016:

      • Seguí con mi época de socialité, celebré mi cumpleaños en la playa, me compré 2 pares de zapatos moníiiiiiisssssimos, Frida me ayudó con el papel que envolvía mis regalos y mi buen amigo N me confirmó que teníamos entradas para ver a Red Hot Chili Peppers en octubre. Un mes cansao, pero muy bueno.
      • Bonus track: lo que no os dije es que la ilusión por mi nuevo trabajo me duró nah y menoh. A las dos semanas de estar allí ya había presenciado gritos, gente muy hija de puta con un aire de superioridad demasiado marcado, hipocresía y maltrato psicológico hacia ciertas personas que usaban como diana. A los pocos días de estar allí, me entero de que la semana anterior se habían largado 3 personas y otras personas que tuvieron algún tipo de relación con esta gentuza, echaban pestes. Yo me mantuve como Suiza, neutral, pero la situación de "tú eres el mono que pinta cosas" ya se estaba manifestando. Un olorcito extraño aparecía de vez en cuando por el ambiente. 



      Julio 2016:

      • Tuve un auténtico ataque de ansiedad que me hizo decidir que no iba a aceptar ningún curro extra después de mi curro oficial. Todo gracias a un capullo que vino a mi casa a comportarse como un bipolar enconcado. Nunca más.
      • Y llevaba, mínimo, 3 semanas mirando otras ofertas de curro. Así se puso la cosa.
      • Al menos tuve una semana de vacaciones. La única que tuve, entera, en todo el periodo laboral de este año. 
      • La empresa que había dejado por mi nuevo trabajo, quebró. Básicamente cierto personaje cogió todo el dinero que pudo y dejó al resto en la calle. Después de todo, mi intuición funcionó e hice bien en irme, aunque el nuevo sitio fuera un puto infierno.

      Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


      Agosto 2016:

      • Os conté un poco sobre mis vacaciones con un bonico vídeo que hice con mi móvil. Y esa semana la pasé entre la playa, descansando, pasando tiempo con una persona que me gustaba mucho, tomando el sol... esas cosas.
      • Ya estaba hasta más allá del coño de mi nuevo trabajo, ese que tanta ilusión me hacía y que en realidad me estaba minando la energía y casi las ganas de vivir cada vez que pensaba en tener que pasar 9 malditas horas allí sentada esperando los cambios sobre cambios, sobre cambios, sobre cambios, sobre cambios de una esquizofrénica que no hacía más que entorpecer el trabajo de los demás. No, en serio, la decepción fue terrible. Yo de verdad que tenía unas ganas tremendas de darlo todo, de desarrollar lo que me había encontrado, de hacer un buen trabajo, de aportar y aprender. Y lo que me encontré es un lugar que va de modernete y en realidad no tienen ni puta idea del mundo digital y sus ventajas. 
      • Fui a The Hole 2 y me lo pasé genial. Pasé una tarde muy divertida y viví algunas momentos que hacía mucho que no experimentaba de estar con ese tipo de compañía. No quería perder los papeles, pero se me estaba poniendo difícil la cosa. 
      • Tomé la decisión de que dejar mi trabajo. Así, sin más. Sin tener otro al que recurrir, renunciando a un finiquito y a la posibilidad de tener paro. Incluso escribí mi carta de renuncia. Me faltaba hablarlo con los SSParents para que, antes de que pusieran el grito en el cielo, comprendieran cuál era mi estado de ánimo, nivel de estrés y frustración. No dormía, comía muy poco regularmente, me salieron un mogollón de canas, tenía un nudo consntante en el estómago y a veces ni siquiera conseguía relajarme estando ya en casa. Me tomaban la tensión y unas veces estaba por las nubes, otra por los suelos. No podía ignorar más esa alarma.


        Septiembre 2016:

        • Unos días antes de presentar mi renuncia, me despidieron"por no haber superado el periodo de prueba". Hacía una semana mínimo que la fecha ya había pasado y, curiosamente, coincidió con la subida de mi sueldo que se había negociado ANTES de que yo aceptara ese trabajo. No es por se suspicaz pero... Me la peló. Gracias por el finiquito y el paro. Que os aguante Rita.
        • Lo que yo creía que era una buena amistad se vio afectada, porque en un principio, yo pensaba que esa persona amiga, defendía mi trabajo. Pero resultó que en cuanto me daba la vuelta, pues no. Yo sólo pedí una tarde para poder asimilar lo que estaba pasando. Lo que venía siendo: me acabo de quitar el puto Empire State de encima. Las dos estábamos de acuerdo en que había sido un pedazo de golpe de suerte. El caso es que por algunas cosas que luego me dijo, su discurso había cambiado. Desde mediados de este mes no nos hemos hablado. Hubo un intento de quedar que nunca se produjo. Me dolió, de verdad pensaba que esa persona me tenía en la misma estima que yo a ella.
        • Empecé a redescubrir lo que era el descanso otra vez. A pasar más tiempo con ese alguien con el que llevaba intentando no perder los papeles desde hacía ya... Me callo. El sol era mi mejor amigo. El vermut era mi mejor amigo. Frida me daba (y me sigue dando) la vida en los momentos bajos. 
        • Este blog cumplió 12 años.
        • Un muchacho de Tonga se mudo a Mi vecindario.
        • Empecé a tener tanto tiempo libre que volví a escribir más a menudo por aquí y, por consiguiente, mi lado más moñas empezó a manifestarse. Porque cuando estás ya cerca de una de esas edades que acaban en -tona, ya muchas cosas te empiezan a importar 1 pepino (=1 mierda).
        • Me puse súper nerviosa porque iba a ver a los RHCP por tercera vez y era algo especial para mí.
        • Bonus track: la fisura en mi sistema de seguridad personal se hizo más que patente y perdí el control con respecto a esos sentimientos que yo no quería tener. Y justo entonces me di cuenta de que lo iba a pasar muy mal de ahí en adelante.




        Octubre 2016:

        • Fui al concierto de los RHCP y fue la repera limonera.
        • Mis queridos Hattori Hanzo Surf Experience presentaron su segundo y nuevo disco, Meanwhile in Mallorca, con la novedad de que, en esta ocasión, yo había hecho el diseño. Llevaba meses aguantándome el notición, así que cuando por fin pude soltarla... Fue lo más. 
        • Todo el trabajo de reprimir esa mierda llamada emociones, me desbordó. Y una de las vías de escape que tuve fue contaros un poquito más sobre mí, porque creo que en 12 años seguramente os he tenido en vilo sobre mi persona (sí, estoy usando la ironía).
        • Bonus track: reconocí ante esa persona que, por primera vez en más de una década, algo se me había desbaratado y no lo podía soportar más. El desbarate no fue correspondido.

        Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el


          Noviembre 2016:

          • Combatí la pesadumbre mateniéndome ocupada. 
          • Empezó el fresquete por aquí, el karma me dio buenas noticias, conocí a señoras estupendas, paseé por la playa, desayuné churros con chocolate, Frida cumplió su primer año... y Fle se casó.
          • El pedaaaaazo de vinilo de los Hattori Hanzo Surf Experience cayó en mis manos. ¡Y dedicado! Hasta entonces yo no había dado mi veredicto sobre lo que opinaba porque quería ver el resultado final. El audio lo había escuchado desde hacía ya rato y no me preocupaba, porque estos gañanes son tan buenos, que lo que me mortificaba era no estar a la altura. Y cuando lo tuve en mis manos... Creo que es lo más cerca que estaré de tener un hijo. Me sé de uno, un pasapenas como yo, que también estuvo conteniendo la respiración (¡igual que yo!) mientras abrían la caja, sacaban un ejemplar y nos lo daban. Sí, sí, a él y a mí, menudo par. Cuando otro me dijo "bueno qué, ahora sí, ¿no? Ahora sí que vas a decir algo, va, que ha quedado genial y lo sabes", yo me limité a soltar un laaaaaargo respiro de alivio. Muy bajito dije "sí" pero en mi cara había una sonrisa como la del gato de Cheshire. No hacía falta decir más. Me faltó el canto de un céntimo para que se me saltaran las lágrimas, también he decirlo. Sólo podía darles las grancias por haber confiado en mí. Y ellos, como son gente muy maja, me decían que es que no tenían ninguna duda sobre mi trabajo. ¡Como pa no llorar ahora que parece que me he vuelto sensible!
          • Otro post en los que os mantenía al tanto de mis anzandas, de mis progresos emocionales, de mi cosas, de mis decisiones.
          • Bonus track: días antes de ese post de actualización sobre mi vida, experimenté un estado de shock que sólo puedes experimentar cuando la persona por la que te has desbaratado te la encuentras acompañada, confirmando así un montón de sospechas e intuiciones de la que no sabías si fiarte o no. Pues sí. La parte buena de todo esto es que, tal vez, esto haya sido el punto álgido de esa época de pasarlo muy mal que me baticinaba meses atrás. 








          Y bueno... estamos en diciembre. Si ocurriera u ocurriese algo, ya sabéis, tocará bis. Pero aún así, sabéis que volveré antes de que acabe el año, porque tengo que felicitaros las malditas fiestas y desearos un feliz año nuevo y chorradas varias.


          Antes de acabar el post, repasando todo lo que he escrito este año, me doy cuenta de que muchas veces no respondo a los que me dejáis comentarios aquí. Me encanta leeros, en serio, pero como no sé si os enteráis si os respondo, siempre pienso que os da un poco igual.

          Que sepáis que a mí me encanta recibir comentarios y también emails. Y que si alguien quiere agregarme a Facebook, me parece genial. Sin miedo. Eso sí, decidme que me conocéis del blog, porque como mi memoria ya no da para más, luego quedo fatal cuando no recuerdo a alguien.

          Supongo que como propósito de año nuevo debería ponerme en la lista lo de responderos los comentarios. Da igual si los leéis o no, pero ya que os tomáis la molestia de venir aquí, qué menos, ¿no?.

          Pues eso, que muchas gracias, por favor, no dejéis de comentar. De verdad que me gusta mucho, mucho, mucho, más de lo que quiere la trucha al trucho.





          Este fin de semana fui a ver, cómo no, a mis adorados Hattori Hanzo Surf Experience, que tocaban con Corizonas. Que son una fusión entre Los Coronas, grandes, y los Arizona Baby, un pelín más... menos... no sé, no puedo definirlos porque no me terminan de llegar al cuore. Pero yo tengo una clara preferencia y debilidad* por los primeros. Y sí, fui a ver a Corizonas porque cuando predomina el sonido de Los Coronas mola mucho más #ESASÍ

          ¡Y qué grande es Fernado Pardo! ¡Y qué crack es el Loza! Joder, ¡qué grandes son Los Coronas!

          Así que despido este post con esta pieza bonita, bonita de Los Coronas con Jairo Zavala.







          * En concreto por Javi Vacas, que me parece un chulazo mmmmmuy interesante a la par que talentoso. Otra vez se me escapó para pillarle y hacerme una foto con él, ains.

          39

          $
          0
          0
          ¿Por qué este post ahora? Pues nenis, porque ahora tengo mucho tiempo libre y tenía ganas de escribir y me he pasado casi todo el año de acá p'acá, en un sinvivir y con muchas ganas de destrucción masiva. 

          Y porque me da la gana.

          Ya tal.


          Cosas de mí en el último año, en el que me he convertido una moñas, por cierto:

          1. Lloro.
          2. Lo he hecho como hacía varios lustros que no lo hacía y me he alucinado a mí misma.
          3. He llorado por todo el malestar y dolor que he sido capaz de acumular...
          4. ... y por cosas tan absurdas como cuando conocí a Frida por primera vez y se quedó dormida en mis brazos. Lo que se dice llorar de felicidad, a mí esta mierda no me había pasado antes y os aseguro que sé lo que es la felicidad.
          5. Seguir todos los pasos, no me garantiza que las cosas vayan a salir bien.
          6. No llevo bien el rechazo. No me refiero tanto en lo laboral (que jode, es cierto), más en lo relacionado con el corasao. Mal. Fatal. 
          7. Verme de nuevo pasando por algo doloroso otra vez desde hacía miles es algo que me hace ir entre el "hostiaputa, no es justo" y el "no puedo creer me haya metido en esta mierda otra vez". Sobre todo cuando lo había llevado tan bien, tan del palo disfruta del momento y, en un pársel, todo a la mierda.
          8. Si algo no me gusta, de alguna manera u otra, lo haré saber. Esto permanece.
          9. Eso no implica que no sepa disimular o, como me han dicho recientemente, marcarme un farol. La iluminación completa de Manhattan si hace falta.
          10. Mi umbral de estrés ha subido a cotas que pensaba que mi mente y mi cuerpo no podrían soportar.
          11. He aprendido a cuidarme un poco más. Ahora que estoy a punto de cambiar de década, cuidarme ya no será por capricho o tontadas mías, ahora tendrá que ser porque sí.
          12. Me gusta el dinero y disfrutarlo. Porque, como a todo ser normal, le gusta llegar a fin de mes pudiéndose permitir un tal o un cual. Cierto. Pero a mí me gusta ya a un punto en el que me muero de miedo al pensar qué va a ser de mí en el futuro si me falta. Ese es mi nivel.
          13. No tener mucha relación con mi hermano me da mucha pena.
          14. He vuelto a intentar aprender a tocar el ukelele. Aprender por tu cuenta es jodido.
          15. Quiero querer sin tener miedo.
          16. Estoy dispuesta a dejar que me quieran.
          17. El miedo a que me hagan daño está en un punto muy sensible ahora mismo.
          18. Netflix y, recientemente HBO, son el mal.
          19. Me he convertido en una persona a la que le gusta desayunar. Eso sí, aún tengo que esperar un rato desde que me levanto para poder hacerlo.
          20. He reducido la ingesta de gluten en mi dieta. No soy celíaca, es sólo un experimento a ver si influye en mi maldito hipotiroidismo autoinmune (deloscojjjjjjones).
          21. Esa enfermedad ha hecho que durante no se sabe cuánto mi estado de ánimo haya fluctuado de la pura energía y alegría a la inactividad y más profunda tristeza (hasta el punto de que, aunque mi cabeza lo mande, mi cuerpo se niega a salir de la cama). Por fin sé que no soy rara, por fin sé qué me pasa.
          22. Me siguen dando el miedo de mi vida las agujas. He tenido que hacerme análisis cada dos meses gracias a la maldita tiroides. Zorra.
          23. Cuando una enfermera es amable conmigo y no me suelta el rollo ese de "es una aguja para bebés" me dan ganas de ponerle la banda de Miss Simpatía. Si no me hace daño, la de Miss Pelo Bonito.
          24. Me he pasado a la Coca-Cola Zero. 
          25. La incertidumbre sigue siendo para mí un problemón.
          26. Todo es mejor con música. La música para mí es lo más y este año ha sido musicalmente enriquecedor, sorprendente y estupendo.
          27. Ser diseñadora es lo mejor que me podría haber pasado. Con sus claroscuros, como todo, pero cada año me reafirmo más: estudiar y ejercer de lo que te gusta está al mismo nivel que la música para mí. Lo más.
          28. La vida comienza donde acaba tu zona de comfort. Estoy de acuerdo, pero a veces me gustaría tener a alguien, no para empujarme a salir de esa zona, sino más bien para poder contarle lo guay que ha sido.
          29. Sigo siendo una malhablada y me la pela.
          30. ¡He conseguido recordar mini-cosas de los sueños que tengo!
          31.  Ahora, cuando miro al pasado, ya no me hace daño, ni me flagelo por mi estupidez o me hace sentir que soy menos válida como persona. Ahora valoro más lo que he aprendido, aunque fuera duro, y que, dentro de lo malo, hubo cosas muy buenas.
          32. Tener un perro es lo más grande. Eso es amor incondicional de verdad.
          33. Sigo pensando que los bisexaules son los más suertudos.
          34. Soy una viejoven: no conozco el panorama músico-chusquero actual (antes por lo menos me sonaban los nombres), no puedo con las modas de las vestimentas de ahora (en 5 años quiero ver las caras de los que van con pitillos tobilleros, camisetones y repeinaos como en los 90) y me río de los hipsters y los veganos. Y no lo siento.
          35. Me siento insegura con mis habilidades para dibujar.
          36. Este año me ha tirado más el salado que el dulce.
          37.  He tirado y donado cosas más que en toda mi vida.
          38. Sigo sin haber encontrado un vestido rojo con el que sentirme guapa, cómoda y no sentir vergüenza al mismo tiempo.
          39. No puedo esperar a enseñaros las felicitaciones que tengo preparadas para navidad y fin de año. SSMom se ha escandalizado con la primera. ¡Mancata! 








          EPMP

          $
          0
          0
          Exceso de Pensamiento Mágico Pendejo.

          Hoy, no sé cómo, he "descubierto" a un hombre que me ha hecho reír al escucharle estando en mi particular y pequeño mar de lágrimas.

          Como ya sabéis, estoy ahí, ahí, pasando un momento bastante sensible, que no ha salido bien, que me hace sentir triste, en definitiva, que me hace llorar cuando pienso en ello.

          Pero intento cambiar de pensamiento en cuanto veo que podría pasar un mal rato. Así que, en medio de mi llorera, me puse a hacer algo que me suele funcionar: buscar vídeos en youtube. De música, sobre todo. Será rockstar frustrada que llevo dentro.

          Sé, que con el tiempo, esto se me va a pasar. Sé que llegará un día en que pensaré, "pues no lo pasé yo malamente ni nah aquella vez que...". Sé que volveré a estar como antes. Más ¿sabia?. Ni idea. Pero sé que volveré a estar bien.

          De momento, así estoy, todo lleva su proceso. Poco a poco, lento, pero seguro. Y esas cosas.

          El caso es que me he metido en youtube, porque no sólo necesitaba escuchar, también necesitaba ver. Así que me puse a buscar en las TED talks. Me gustan esas charlas. Me entretiene mucho escuchar a personas que tienen puntos de vista diferentes. O muy parecidos a los míos, me hacen sentirme menos out de lo que normalmente me siento.

          Y llegó Odín Dupeyron. El maravilloso Odín Dupeyron.

          No lo conocía. ¡No lo conocía! ¿Cómo no he podido saber nada de este señor que cada palabra que le he escuchado es exactamente lo que pienso? ¡¿CÓMO?!

          Es exacto, os prometo que todo lo que le he escuché en la primera charla que encontré de él, era 100% mi cabeza. Pero pensé... "¿Y si sólo ha sido una casualidad?". Pues he seguido buscando sobre él y encontré LA CHARLA. Repito: LA CHARLA.

          Ya la he compartido en mi FB y TW, pero tenía que escribir sobre esto porque ahora mismo. AHORA MISMO, escuchar a alguien que por fin dice lo que siempre he pensado ha sido GRAN-DIO-SO.

          No podía parar de flipar, porque dentro de que dice cosas duras, de la realidad, de la vida, joder, no puedo creer que alguien haya expresado en voz alta lo que pienso.

          Por favor, escuchadle.




          Me encanta cómo se expresa, es que me identifico totalmente con su manera de contar las cosas. Me encanta su ironía, su sarcasmo, que sea un malhablado, que pueda sacar un algo gracioso de algo doloroso, de decir las cosas de una manera tan lógica. No sé si es de lógica, pero es que YO comparto ese tipo de lógica*.

          Por eso me ponen de los nervios las personas felices. No me malentendáis, odio a esas personas hinchapelotas que pertenecen a la puta secta del optimismo enfermizo. Esa gente que con Exceso de Pensamiento Mágico Pendejo.¡Dejadme en paz, coño! Soy una persona optimista. LO SOY. Porque si no lo fuera, os puedo asegurar que no estaría aquí. Y no me refiero al blog. Me refiero a este mundo. Porque sinceramente, vivir para ser una amargada de la vida, para verlo todo negro, para acabar diciendo cual señora de luto eterno "no somos nadie / señor, llévame pronto / hemos venido a sufrir"... Apago y me voy.  A mí no me tiembla el pulso**.

          Si quiero llorar, lloro. Porque si me duele, lo último que quiero es poner una sonrisa y comerme un puto cupcake de red velvet de los cojjjjones. Si necesito estar deprimida, quemedeheeee. Si me siento feliz, voy a ser feliz, tú no te preocupes, que me comeré mi cupcake y el tuyo. Porque a lo mejor ese es mi proceso para curarme las malditas heridas. ¿Qué te crees? ¿Que me encanta estar deprimida y pensar en lo desgraciada que me siento por tal o cual? No, nenis, no. Yo quiero ser tan feliz como el que más, pero no me da la gana serlo cuando no tengo ganas, coño.

          Y si tengo que elegir entre mucha pasta y poder volver al pasado, que le peten a la pasta, yo me voy al pasado a evitar ciertos momentos de mi vida que ojalá no hubieran pasado y hubiera tomado las decisiones que yo creía que debería haber tomado y, aquellas que tomé y de las que me equivoqué, evitarlas igualmente. Sí, volvería al pasado y hubiera repartido muchas más hostias y hubiera sido menos felpudo. Elegiría ser más yo y menos lo que algunos quisieron que fuera. Elegiría no haberme dejado contagiar por miedos ajenos y más de mi propio entusiasmo. Porque os lo repito: yo no soy una triste, una pesimista, una amargada. Lo que soy es una persona a la que le han fomentado la estúpida inseguridad y muy poquito la autoestima. Pero yo, por dentro, la mayor parte del tiempo pienso en mis momentos más felices, en las personas que más quiero y en esas emociones que se me quedaron grabadas para el resto de mi vida.

          Pensaréis que estoy como un puto cencerro, que he tenido una revelación y me he vuelto una loca del coño. Ni confirmo, ni desmiento. Lo único que sé es que mi aspecto esta mañana era bastante decrépito, con mi pijama, con 2 ó 3 pañuelos usados ya a mi alrededor, con otro en la mano, con los ojos hinchados y muy fea, queridos. Muy fea. Porque si algo tengo en común con Kim Kardashian, a parte del tamaño de la pechonalidad y el donde la espalda pierde su casto nombre, es que me pongo fffffffeísssssima cuando lloro...



          ... y ha sido toparme con esta charla de Odín Dupeyron y me he reído. Y me he sentido identificada. Y lo he entendido todo. Porque por fin alguien comprende las emociones como las comprendo y habla el mismo idioma que yo. Pero con acento mexicano, que taaaaaanto me encaaaaaanta.

          ¿Que a veces se me va un poco de las manos cuando estoy triste? Pues sí, porque lidiar con estas cosas cuando ya no sólo te sientes sola, sino que incluso pidiendo no estar sola, no lo consigues, es una puta mierda y espero que no os pase nunca.

          Ha sido refrescante. Ha sido fantástico. Ha sido reconfortante. Ha sido ggggggenial.

          Y no he llorado más en todo el día, porque en el fondo sé que, a pesar de todo tengo clarísimo que esto me va a volver a pasar:

          Una foto publicada por Mara Jade (@supersonicgirl) el




          Pd: pendejo, pinche, chingón, a huevo, poca madre,... yo quiero hablar en mexicano, güeys.


          * Obviamente, me he comprado su primer libro.
          ** Y tengo testigos.
          Viewing all 380 articles
          Browse latest View live