¡Hola nenis!
Bueno, pues como ya sabéis, la semana pasada estuve en Nueva York. ¡Qué gran ciudad queridos!
Como os prometí, mi instragram estuvo ON FIRE y creé el hashtag #supersonicgirlenNY para que pudiérais ver todas las fotos que iba subiendo. Si todavía no me sigues, estás tardando, no sólo por las fotos de NY, básicamente porque mis fotos son chulis XD
En fin, como también os conté, a mí me hacía una ilusión enorme que la primera ciudad que visitara de EEUU fuera San Francisco, pero por precio, se escapaba de mi presupuesto. Así que surgió Nueva York y no le iba a hacer ascos. No sé vosotros, pero no me salen estas oportunidades todos los días.
Una mini-decepción sí que tenía. No me preguntéis porqué, pero tengo fijación por San Francisco. PEEEEERO... ha resultado que sí, que Nueva York es un ciudad alucinante, me ha encantado, fascinado, flipado y enamorado. Así que estoy súper contenta de haber podido ir y disfrutar de sus calles, su ambiente, la gente...
Con el viaje a Tenerife hice un post para cada día (1, 2, 3 y 4) y me dio para un mes. Si tengo que escribir un post por día de este viaje: me pillan los Oscar contándoos. Así que he decidido que haré una serie de post en los que iré contando mis impresiones, opiniones, emociones y alucines varios, ¿vale?.
Pues nada, comenzaré por fin este post número 1 haciendo una lista a modo de resumen. No descarto que en los siguientes posts haga más listas, así no os aburrís.
Antes de seguir contándoos, voy a explicar lo que pueda ese asterisco (*) que he puesto en el último punto de la lista.
Repito: yo soy una tía que va mucho del palo tecnológico. Me gustan estos inventos, los ordenadores, los teléfonos, las tabletas, las aplicaciones, el 3D... no soy una especialista, digamos que me manejo, pero jamás abriría mi Macbook sin supervisión. Me muero.
Creo, en serio, lo repito, creo que soy más bien tolerante y si a ti te mola ir con un mapa convencional, me parece bien. Pero el problema viene cuando te encuentras con alguien que sistemáticamente odia cualquier intento de guiarse por una app, por ejemplo. O que tampoco intentes entender cómo funciona o al menos esperar a que aumente la pantalla para ver el nombre de una calle. Si yo me dejo guiar por ti, que no tengo ningún problema, me gustaría que cuando intento guiar yo, no se ponga el grito en el cielo porque no me apetece usar un mapa de papel para las calles y otro para el metro.
Además, varias personas con las que he viajado son testigos de que a mí me gusta callejear como a quien más, pero también he ido a visitar una ciudad con puntos que me gustaría ver por mí misma. Un mínimo de planificación me gusta. Sobre todo si me he ocupado en investigar sitios a los que no todos los turistas van.
Genial ir de un sitio a otro andando, os lo prometo que Nueva York no defrauda. Es que mires por donde mires encuentras donde mirar y no puedes evitar pensar en la suerte que tienes de haber podido estar allí. Yo lo he pensado todos los días y varias veces al día. No me lo creía e incluso daba las gracias por la gran idea de haber ido a Nueva York cuando yo estaba un poco chof por lo que costaba ir a San Francisco.
Otra cosa es, lo que he dicho antes (no me cansaré de repetirlo, porque quien quiera que lo lea, no quiero que se sienta mal, aunque lo hará, porque un poco sí la conozco), que en el mapa tú lo veas al lado, y en la realidad se encuentre a unas siete manzanas (si es en avenida, son 500 metros, por 7 son 3,5 kilómetros, que no parece mucho, pero cuando llevas todo el día pateando o estás a -4ºC con un viento insoportable, se hace largo).
No voy a decir más, pero no esperaba encontrarme con algunos pollos con los que me encontré de una persona a la que en poco tiempo le he cogido tanto cariño y que la tengo en gran estima.
Salvando esos momento más que incómodos, he disfrutado Nueva York, me he reído, he hecho fotos increíbles, he ido a muchos sitios que quería visitar, me he desnucado viendo rascacielos inmensos y, de repente, un edificio victoriano en medio, disfrutar el maravilloso art deco que está por todas partes o edificios modernos y minimalistas, por lo que más queráis nos os perdáis el vestíbulo del Empire State (y por supuesto su mirador), ¡esos perritos del Gray's Papaya o un Frrrozen en Serendipity!, el skyline desde el puente de Brooklyn, Central Park desde cualquier punto... ¡Qué semana más fabulosa!
He vuelto maravillada y con ganas de volver, en otra época del año para comparar. He pasado frío, sobre todo los tres primeros días, porque las temperaturas fueron muy bajas. Pero el más insportable fue el primero. Me dejé el gorro en casa y hubo momentos en los que pensé que no lo aguantaría, que me largaba a casa. Pero a MI casa a MaraMansion. Los otros días hizo frío, bajo cero también, pero al menos no hubo viento. Luego, de repente, 11ºC y el último día llegamos al os 18ºC. Una locura.
Otra pequeña lista por si váis cuando haga frío:
![World Trade Center, Manhattan (NYC)]()
Zona Cero, aquí estaba una de las Torres Gemelas, sobrecogedor
![Times Square, Manhattan (NYC)]()
![Times Squares, Manhattan (NYC)]()
Times Square
![Manhattan street, near Vanderbilt Building (NYC)]()
Rascacielos saliendo de Grand Central Station
Saint Thomas Church
![Plaza Hotel, Manhattan (NYC)]()
Hotel Plaza
![Grand Central Station, Manhattan (NYC)]()
Grand Central Station
![Freedom Tower, Manhattan (NYC)]()
Freedom Tower en el WTC
![Freedom Tower, Manhattan (NYC)]()
Desde abajo, la Freedom Tower es como una moderna pirámide
![Fashion district, Manhattan (NYC)]()
Está claro que esto sólo puede estar en el Fashion District
![Apple Store, 5th Avenue, Manhattan (NYC)]()
La tienda de Apple en la 5ª Avenida, a un lado el Hotel Plaza, al otro FAO Schwarz y un pelín más allá Central Park
![Manhattan view form Empire State Building (Downtown)]()
![Manhattan view form Empire State Building (Uptown)]()
Las vistas de Manhattan desde el mirador del Empire State
![Lego corner, FAO Schwarz, 5th Avenue, Manhattan (NYC)]()
En FAO Schwarz con Boba Fett hecho de Lego
![Atlas Statue, Manhattan (NYC)]()
Estatua de Atlas
Y hasta aquí, el primero de unos cuantos post sobre mi viaje a Nueva York :)
Bueno, pues como ya sabéis, la semana pasada estuve en Nueva York. ¡Qué gran ciudad queridos!
Como os prometí, mi instragram estuvo ON FIRE y creé el hashtag #supersonicgirlenNY para que pudiérais ver todas las fotos que iba subiendo. Si todavía no me sigues, estás tardando, no sólo por las fotos de NY, básicamente porque mis fotos son chulis XD
En fin, como también os conté, a mí me hacía una ilusión enorme que la primera ciudad que visitara de EEUU fuera San Francisco, pero por precio, se escapaba de mi presupuesto. Así que surgió Nueva York y no le iba a hacer ascos. No sé vosotros, pero no me salen estas oportunidades todos los días.
Una mini-decepción sí que tenía. No me preguntéis porqué, pero tengo fijación por San Francisco. PEEEEERO... ha resultado que sí, que Nueva York es un ciudad alucinante, me ha encantado, fascinado, flipado y enamorado. Así que estoy súper contenta de haber podido ir y disfrutar de sus calles, su ambiente, la gente...
Con el viaje a Tenerife hice un post para cada día (1, 2, 3 y 4) y me dio para un mes. Si tengo que escribir un post por día de este viaje: me pillan los Oscar contándoos. Así que he decidido que haré una serie de post en los que iré contando mis impresiones, opiniones, emociones y alucines varios, ¿vale?.
Pues nada, comenzaré por fin este post número 1 haciendo una lista a modo de resumen. No descarto que en los siguientes posts haga más listas, así no os aburrís.
- Ya había leído que la seguridad en la ciudad había mejorado mucho. Con un poco de lógica, si eres turista, sabes lo que tienes que hacer. Pero lo cierto es que me ha sorprendido gratamente. Yo he llevado un mochila todos los días a la espalda (¡por dioxxx lo que ha llegado a pesar!), incluso en el metro, y nada de nada. Eso sí, lo verdaderamente importante (dinero, móvil, pasaporte) lo llevaba en otro sitio. Pero de verdad, ningún problema.
- Así mismo, la gente es muy amable. A lo mejor es que tuvimos mucha suerte, pero de verdad que la gente es increíblemente amable. Como te noten que miras un mapa, sin más se acercan a ti y te preguntan si te pueden ayudar. No te arrollan por la calle, en serio, y si lo hacen, se disculpan. Que no sé de verdad si es que tuvismo suerte, pero no ha habido sitio del que nos hayamos ido donde no nos dijeran un "Have a nice day", "Enjoy" o similares. Alguna ranciedad hubo, pero nada que ver con la amabilidad y simpatía, por poneros un ejemplo, de un megasegurata del MoMA. Un armario empotrado de cuatro puertas, afroamericano y con una sonrisa blanquísima, que nos estuvo contando que le encantaría hacernos una foto, pero es que las cámaras también lo vigilaban a él y ese no era su trabajo. La forma en que nos explicó cómo le iban a reñir fue muy graciosa. Os digo una cosa: todo lo majo que fue, no quisiera tenerlo de mal rollo. Otro ejemplo fue en el primer café que encontramos en Brooklyn para desayunar el primer día. Nos dio indicaciones del metro, dónde podía comprar el número de teléfono, qué línea nos recomendaba... y nos dio su tarjeta para que llamáramos por si teníamos algún problema. Nenis, así sí.
- Ya tenía claro cómo funcionaba el sistema de avenidas y calles, pero creí que no sería capaz de entenderlo una vez allí. Pues no, es un sistema tan lógico y sencillo, que hasta yo lo he pillado sin ningún problema.
- Recomendación: hacerse con un número local. Hay wifi en muchos lugares, pero no en todos funciona, lo he comprobado. Algunos te pone que es gratis, pero a veces sólo durante un tiempo, luego tienes que pagar. Eso sí, en las cafeterías, centros comerciales y, por supuesto, las tiendas de Apple, hay un buen wifi gratuito. Lo del número os lo aconsejo porque viene muy bien para usar la app del metro, el Google Maps, hacer reservas y pagos online, llamadas para confirmaciones o pedir taxis, controlar las rutas de los taxistas para que no os timen ;), si vais con mapa de papel y no os aclarais, la app de Central Park (te da rutas a pie, en bici y te va mostrando y dando información de los puntos de interés, que no siempre es Strawberry Fields, jeje)... Pedís una sim de prepago en AT&T o Verizon, que son de las más usadas, tienen una buena cobertura, lo más seguro es que os lo den por un mes, pero la tarifa está muy bien. Llamadas locales ilimitadas e internet ilimitado.
- Yo compré el City Pass. Son 109$ que de verdad salen a cuenta. Puedes visitar el Empire State, MoMa, Metropolitan Museum, Guggenheim, Top of the Rock, Luna Park, crucero alrededor de Manhattan... algunas cosas son a elegir, pero de verdad que vale la pena, te ahorras una pasta y no tienes que esperar colas (aunque yo no tuve que esperar mucho porque en esta época es temporada baja). Además, te dan descuentos para tiendas y otros lugares. Los descuentos, ojo, porque en Macy's te dirán que justamente ellos son sólo un corner, no son del mismo centro comercial, pero les pides que te muestren dónde pone eso y listo.
- Usar las app disponibles, son muy útiles. Por ejemplo, la que he mencionado de Central Park o la del metro. Pero también la de TKTS, para informaros sobre las obras de teatro y musicales que se están representando, así como de las entradas, horarios, precios... Además, con Google Maps, si le das a la opción de metro, te dice las estaciones de metro y combinaciones de metro y bus.
- Metrocard: imprescindible si quieres moverte rápido para llegar de un punto a otro. Caminar por la ciudad está muy, muy bien, en serio, pero es un lugar enoooorme, y lo que parece que está al lado en el mapa... no tenéis ni idea de lo lejos que en realidad está. Por eso, pillaros una Metrocard que no sólo te sirve para el metro, sino también para el bus. 31$ para toda una semana. Más que rentable.
- Tarjetas: si lleváis de débito, no suele haber problema, pero si véis que os pone "debit", que sepáis que sólo funciona para las tarjetas locales, no las extranjeras. Por si acaso llevaros una tarjeta de crédito.
- Dinero en efectivo, básicamente para pequeños gastos diarios como cafés, alguna cosa para comer, souvernirs, propinas... el resto, se puede pagar con tarjeta. Incluso las propinas.
- Propinas: sin problemas, un mínimo de un 10%, que no os dé reparo, te tratan muy bien y realmente es merecida. De todas formas, cuando te traen la cuenta, un poquito más abajo en el ticket, verás que te hacen "sugerencias" para que no tengas que calcular nada. El mínimo oscila entre el 6-8%, dependiendo del lugar.
- No suele haber mapas gratis en las estaciones de metro, los tendréis que comprar, a no ser que os los den de publicidad de algún sitio. Pero vamos, no son tampoco una exageración de caros. Yo soy más del palo tecnológico y usé lo que pude mi iPhone, pero dentro de algunas estaciones (algunas tienen wifi, pocas) y durante el trayecto, no suele haber cobertura. En cada vagón hay mapas, pero no está de más llevar el vuestro que os puede sacar de más de un apuro.
- Importante*: no es fácil viajar con otras personas. Quicir, hay que ser paciente, pero tampoco dejaros mangonear. Si hay roces, es mejor hablarlo. Si se arregla, genial. Que no, os aseguro que tendréis un disgusto, pero la ciudad es tan maravillosa que por entretenimiento no va a ser. De verdad os lo digo.
Antes de seguir contándoos, voy a explicar lo que pueda ese asterisco (*) que he puesto en el último punto de la lista.
Repito: yo soy una tía que va mucho del palo tecnológico. Me gustan estos inventos, los ordenadores, los teléfonos, las tabletas, las aplicaciones, el 3D... no soy una especialista, digamos que me manejo, pero jamás abriría mi Macbook sin supervisión. Me muero.
Creo, en serio, lo repito, creo que soy más bien tolerante y si a ti te mola ir con un mapa convencional, me parece bien. Pero el problema viene cuando te encuentras con alguien que sistemáticamente odia cualquier intento de guiarse por una app, por ejemplo. O que tampoco intentes entender cómo funciona o al menos esperar a que aumente la pantalla para ver el nombre de una calle. Si yo me dejo guiar por ti, que no tengo ningún problema, me gustaría que cuando intento guiar yo, no se ponga el grito en el cielo porque no me apetece usar un mapa de papel para las calles y otro para el metro.
Además, varias personas con las que he viajado son testigos de que a mí me gusta callejear como a quien más, pero también he ido a visitar una ciudad con puntos que me gustaría ver por mí misma. Un mínimo de planificación me gusta. Sobre todo si me he ocupado en investigar sitios a los que no todos los turistas van.
Genial ir de un sitio a otro andando, os lo prometo que Nueva York no defrauda. Es que mires por donde mires encuentras donde mirar y no puedes evitar pensar en la suerte que tienes de haber podido estar allí. Yo lo he pensado todos los días y varias veces al día. No me lo creía e incluso daba las gracias por la gran idea de haber ido a Nueva York cuando yo estaba un poco chof por lo que costaba ir a San Francisco.
Otra cosa es, lo que he dicho antes (no me cansaré de repetirlo, porque quien quiera que lo lea, no quiero que se sienta mal, aunque lo hará, porque un poco sí la conozco), que en el mapa tú lo veas al lado, y en la realidad se encuentre a unas siete manzanas (si es en avenida, son 500 metros, por 7 son 3,5 kilómetros, que no parece mucho, pero cuando llevas todo el día pateando o estás a -4ºC con un viento insoportable, se hace largo).
No voy a decir más, pero no esperaba encontrarme con algunos pollos con los que me encontré de una persona a la que en poco tiempo le he cogido tanto cariño y que la tengo en gran estima.
Salvando esos momento más que incómodos, he disfrutado Nueva York, me he reído, he hecho fotos increíbles, he ido a muchos sitios que quería visitar, me he desnucado viendo rascacielos inmensos y, de repente, un edificio victoriano en medio, disfrutar el maravilloso art deco que está por todas partes o edificios modernos y minimalistas, por lo que más queráis nos os perdáis el vestíbulo del Empire State (y por supuesto su mirador), ¡esos perritos del Gray's Papaya o un Frrrozen en Serendipity!, el skyline desde el puente de Brooklyn, Central Park desde cualquier punto... ¡Qué semana más fabulosa!
He vuelto maravillada y con ganas de volver, en otra época del año para comparar. He pasado frío, sobre todo los tres primeros días, porque las temperaturas fueron muy bajas. Pero el más insportable fue el primero. Me dejé el gorro en casa y hubo momentos en los que pensé que no lo aguantaría, que me largaba a casa. Pero a MI casa a MaraMansion. Los otros días hizo frío, bajo cero también, pero al menos no hubo viento. Luego, de repente, 11ºC y el último día llegamos al os 18ºC. Una locura.
Otra pequeña lista por si váis cuando haga frío:
- Llevad medias gruesas o ropa térmica debajo de los pantalones. A mí me han salvado la vida.
- Calzado cómodo, imprescindible. Si por lo que sea, no tienes o resulta que el que tienes no es tan cómodo como creías, te compras unas deportivas. Los precios comparados con los de aquí, están tirados.
- No hace falta que sea de Starbucks, hay millones de cafeterías con café, chocolate caliente, tés... No sólo hay que hidratarse, el calorcito de las bebidas en las manos es muy reconfortante. No es que los neoyorkinos sean adictos a la cafeína, es más, su café es lo que un habituado a tomar café de verdad llamaría agua sucia. Yo pedí doble shot de café porque eso una tiene sus necesidades mañaneras.
- Gorros, orejeras, bufandas y guantes no son mala idea. Una vez más, si no los tenéis, están por todas partes y son baratos.
- Cacao o labiales hidratantes para los labios si no queréis acabar con los morros como dos salchichas. ¿Que se os ha olvidado?. Sin problema: las "farmacias", que no son como aquí, algunas venden medicamentos con recetas y otras no, son como supermercados con millones de vitaminas, labiales, parches, jarabes, caramelos, potingues para masajes, cosas para bebés... todo, todo y todo.
- Yo no lo hice porque me daba vergüenza, tenía los pies hechos un horror después de tanto días de caminar, pero si váis por Chinatown, hay sitios de masajes. Y son de verdad. Tanto de espalda, pies, cuerpo completo... se mide por tiempo y lo hacen muy bien. Pero ojo: si te dicen que 15 minutos, harán un poco más sin decirte nada, te lo cobrarán y te dirán precio fijo de propina. Ni rechistéis, los chinos no regatean. Eso sí, el precio está bien y se lo curran, pero esos detalles no molan.














Y hasta aquí, el primero de unos cuantos post sobre mi viaje a Nueva York :)